Aunque el Consistorio madrileño considera que hay muchas cosas mejorables en la Puerta del Sol, el equipo de gobierno municipal ha descartado hoy que se emprenda una rehabilitación integral de la plaza.
Según el Ayuntamiento, la ubicación de la estatua de Carlos III no es la más adecuada, ni tampoco el diseño acristalado de la boca de Cercanías, ni la distribución de los quioscos, pero apuesta por las pequeñas intervenciones, como la instalación de bancos.
La plaza fue remodelada por última vez en 2009 con una inversión de 4,5 millones de euros. Una reforma muy criticada por el excesivo granito empleado, por lo que ahora el Ayuntamiento esperará a tener un amplio consenso ciudadano y con la Comunidad para emprender una rehabilitaciones o, al menos, actuaciones menores.