Con banderas, al cuello, enrolladas en los brazos, dos dioses Cibeles y Neptuno se "han apuntado" al rojo de la selección. Estas dos emblemáticas plazas madrileñas, "sedes" de los triunfos del Real Madrid y del Atlético, hoy cambian los colores de los clubes por los de la selección y aguardan impacientes la llegada del cuadro que ha hecho historia sumando un priplete de títulos: los chicos de Vicente del Bosque.