Los organizadores explican que esta protesta se llevará a cabo a las 20 horas en el epicentro madrileño coincidiendo con el 83 aniversario del «golpe militar contra el régimen democrático y legal de la segunda República». «Cada día que Franco pasa en Cuelgamuros constituye un insulto a la sociedad española y a la democracia, y un menosprecio a sus cientos de miles de víctimas. La exhumación de los restos mortales del dictador es un acto de justicia, y una medida de reparación moral y simbólica de las víctimas de la dictadura», dicen en una nota de prensa.
Asimismo, subrayan que el Tribunal Supremo debió rechazar las medidas cautelares solicitadas por la familia de Franco pero este órgano ha ido «más lejos argumentando que se aprueba la medida cautelar porque la exhumación sería perjudicial para la familia y para el interés público, y que incluso hay coincidencia entre estos intereses, lo que supone un cinismo insultante». «Resulta un sarcasmo la protección cautelar y urgente del interés familiar del dictador, frente al desentendimiento del Estado de tantas víctimas del franquismo que todavía esperan justicia y reparación», critican.
También advierten la denominación de Franco como jefe de Estado desde el 1 de octubre ya que resulta «inaceptable la equiparación que el tribunal viene a hacer entre dictadura y democracia, al dar continuidad y validez a los efectos producidos por un golpe de Estado contra el régimen democrático republicano». Asimismo, creen que el enterramiento del dictador en la Almudena podría tener «consecuencias enormemente negativas para la imagen internacional de la ciudad», y para la convivencia de los vecinos y vecinas de la ciudad, y sus visitantes.
Para finalizar, advierten que en caso de que el Supremo estime paralizar la exhumación seguirán «trabajando» para que el nuevo gobierno adopte de forma inmediata las «medias políticas y legales que permitan retomar el proceso de salida definitiva e irreversible de Franco».
