Los uniformados pidieron al individuo que se identificase para interponer la correspondiente denuncia. Mientras levantaban el atestado, los agentes comprobaron que el varón presentaba un gran nerviosismo, lo que activó las sospechas de los policías. Le preguntaron si llevaba algo que pudiera comprometerle, sacando el ciclista una bolsa pequeña con cuatro bolsitas en su interior, de un gramo cada una, aproximadamente, con una sustancia en polvo de color blanco, al parecer heroína.
El ciclista también portaba una mochila con los paneles isotérmicos modificados artesanalmente con cartón e imanes, encontrando en el interior de uno de ellos diez bolsitas pequeñas con cocaína, siete bolsitas con ketamina, ocho bolsitas con cristal, todas ellas de un gramo, aproximadamente, y 28 pastillas de éxtasis, todo ello predispuesto para su venta. El ciclista fue detenido por un delito contra la salud pública y trasladado a dependencias policiales para pasar a disposición judicial.