En los incidentes fueron arrestadas doce personas, diez de ellas procedentes de la citada manifestación y dos de una concentración de ultraderecha convocada entre las calles Goya y Alcalá. La Policía también identificó a 111 integrantes del primer grupo y a 160 del segundo. Dos de los doce arrestados son menores, de 14 y 17 años, y pasaron a disposición de la Fiscalía de Menores, según fuentes policiales.
Entre los arrestados mayores de edad hay seis hombres de 18, 19, 20 y 23 años y cuatro mujeres de 19 y 21. Todos son españoles menos dos hombres argentinos y una mujer rumana, según las fuentes. Están acusados de protagonizar disturbios y enfrentarse a los agentes, en algunos casos con piedras de gran tamaño y un martillo rompelunas, han precisado las fuentes. En uno de los casos agentes de la Brigada Móvil de transporte vieron a un grupo de unos diez jóvenes sobre las 21:25 horas en las escaleras del Metro de Ópera, vestidos con sudaderas y capuchas y pañuelos con los que ocultaban el rostro, que supuestamente habían asistido a la manifestación en favor de «la amnistía de los presos políticos» catalanes.
De forma sorpresiva uno de ellos lanzó un adoquín de grandes dimensiones a un furgón de la Unidad de Intervención Policial (UIP) y rompió la ventana de la puerta del conductor, tras lo que huyó hacia el interior del metro. Cuando un agente le dio alcance el joven golpeó al policía en la cara con el codo, causándoles lesiones leves, y al ser arrestado se la intervino un martillo «rompelunas», de los que se usan para romper ventanillas de emergencia, y un adoquín. Portaba también un panfleto que ponía «ezquerra revolucionaria» y aludía a la «república catalana de trabajadores y jóvenes». Los disturbios del sábado se saldaron con 26 detenidos, diez de ellos policías, todos leves.
