El Museo de la Ciudad cerrará el día 1 de agosto, pero la noticia no ha llegado a los concejales del Grupo Socialista del Ayuntamiento de Madrid a través de ningún organismo ni responsable municipal sino por la lectura de un periódico madrileño. El portavoz del grupo, Jaime Lissavetzky, ha denunciado esta maniobra del equipo de gobierno y la falta de explicaciones al respecto por parte del equipo de gobierno cuando la concejala Ana García d’Atri, preguntó por el futuro del Museo en la Comisión Informativa de las Artes.
“Parece que aquí va a trasladarse la sede del Área de Economía y Empleo, actualmente emplazado en un edificio alquilado en la Gran Vía.”, ha manifestado Lissavetzky en la puerta del Museo, en la calle Príncipe de Vergara. Aunque este traslado suponga ahorrarse el alquiler mensual de un inmueble costoso, y soslayando la pregunta de por qué el Ayuntamiento ocupaba dependencias ajenas cuando dispone de tantos metros cuadrados vacíos en sus edificios propios, el portavoz socialista se ha quejado de la pérdida cultural de Madrid, en general, y del distrito de Chamartín, en particular.
“Me parece muy bien la austeridad, pero no a costa de los equipamientos culturales”, ha dicho Lissavetzky, que ha insistido también en que hay otros edificios municipales, vacíos o desaprovechados, a los que podían trasladarse las dependencias que ahora están en edificios alquilados. Como el Palacio de Cibeles, una obra costosa donde hay muchos metros desocupados.
“También reclamamos una política museística correcta. Porque Madrid tiene una historia y hay que mostrarla”, ha reiterado el portavoz socialista. Porque al margen de las grandes instituciones culturales, la ciudad tiene que mostrar su historia, sus documentos, su evolución. Y eso es este museo, inaugurado en 1992, cuando Madrid era Capital Cultural Europea”.
Además, denuncia el grupo socialista, no se sabe exactamente qué va a ocurrir con los fondos del museo. Los responsables de las Artes no dicen qué harán con las maquetas, a dónde las llevarán. Este desmantelamiento, que Lissavetzky ha calificado de absurdo, era el motivo de la visita que el portavoz y los concejales socialistas Ana G. D´Atri y Alberto Mateo iban a realizar al Museo de la Ciudad esta mañana. El interés del PSOE era que la prensa conociera el museo y viera sus fondos, para pedir después que se respete la institución.
La noticia del cierre ha sido posterior a una llamada “inquisitiva”, que recibió ayer la concejala Ana García d´Atri, por parte de responsables de las Artes, preguntándole por la visita y por las declaraciones que iban a realizar, han motivado la decisión de no entrar en las dependencias y hacer su denuncia en la puerta, sin comprometer a los trabajadores.
