El Real Madrid iniciará hoy miércoles en el Santiago Bernabéu (20.45/Telemadrid) y ante un histórico que busca su lugar en el panorama continental como el Ajax, su andadura en busca de la Liga de Campeones, la ansiada ‘Décima’ que se lleva esperando desde hace ya muchos años.
El conjunto blanco ganó su último título continental en 2002, y desde entonces su gran ambición, como reconocen desde dentro y fuera del vestuario, se le ha resistido e incluso lleva seis años sin brillar en el torneo en el que es el más laureado.
Ahora, y con el aval de José Mourinho, ganador en dos ocasiones de la Copa de Europa, la de 2004 con el Oporto y la del año pasado con el Inter, donde fue capaz de dejar fuera al FC Barcelona, el equipo madridista espera reverdecer viejos laureles y volver a estar en la pelea, empezando por firmar una brillante fase de grupos.
Cristiano Ronaldo avisó el lunes que el Real Madrid está "en construcción" y así se ha podido comprobar en sus dos partidos ligueros en Palma de Mallorca y ante Osasuna, donde del caudal goleador de la ‘era Pellegrini’ se ha pasado a un tanto en dos encuentros, y obra de un central (Carvalho).
Pese a su apuesta ofensiva, con dos medioscentros (Alonso y Khedira) y cuatro jugadores muy ofensivos (Ozil, Cristiano, Higuaín y Benzema), el conjunto madrileño no ha logrado, de momento, maravillar a nadie, aunque se ha mostrado muy sólido atrás, sin encajar todavía un gol. El Bernabéu expresó su descontento el pasado sábado y este miércoles someterá a un nuevo examen al equipo, más exigente si cabe por tratarse de la ‘Champions’, aunque habrá que ver si el mensaje de ‘CR7’ ha calado en la afición.
El Real Madrid tiene como ‘obsesión’ levantar su décima Copa de Europa, pero primero debe sobrevivir a un grupo engañoso, con un Milan reforzado en su parte delantera, un Auxerre que quiere emular al Lyon, y un Ajax, primer rival, que apuesta por la juventud y por el buen fútbol. Por ello, no fallar en casa es la primera premisa para afianzarse de cara a lograr la primera plaza y un cruce más asequible para superar el ‘muro’ infranqueable los últimos seis años de los octavos.
