El pasado 5 de septiembre se inauguró el polideportivo de Chamartín en la plaza del Perú. Según adelantó entonces el periódico 20 Minutos, la piscina del Centro deportivo no satisfizo a algunos de los vecinos y la situación sigue igual. Dispone de calles de 21 metros en lugar de 50, una estrechez que sigue sin convencer a los usuarios. De hecho, el consistorio madrileño en su web Madrid.es sigue informando que el vaso de la piscina mide 50 metros, algo que no se ajusta a la realidad.
La responsable de esta piscina es Forus, con Fernando Pernas como encargado de marketing, a la que el Ayuntamiento de Madrid le ha adjudicado la gestión durante 15 años a cambio de pagar un canon anual de 300.000 euros. Forus ha aumentado el número de calles para nadar, divide la piscina a lo ancho y no a lo largo, algo para rentabilizar su inversión. Esto impide que los deportistas profesionales tengan espacio para entrenar.
El consistorio madrileño ha invertido más de 4 millones de euros en remodelar el Centro durante dos años, algo que no justifica la subida de tasa de Forus en el abono mensual, de 43,9 a 45,15 euros, a lo que hay que sumar la inscripción de 13,5 euros. Un negocio redondo para los tiempos de crisis.