Más de 400 jóvenes y un total de 134 grupos utilizaron el pasado año los locales gratuitos de ensayo de la estación de Cuzco. Unas instalaciones que, sin embrago, son todavía desconocidas para la mayoría de los madrileños.
Se trata de cuatro salas ambientadas con todo lo necesario para acoger actividades de danza, música, teatro y grabación. Disponen de suelo de madera, espejos, barras y tecnología para facilitar las actividades que promueven. Además, durante los meses de julio a septiembre del pasado año, se acometieron obras de acondicionamiento para ofrecer un mejor servicio a los jóvenes. La reforma ha consistido en la eliminación de humedades en paredes y techos, en el montaje de puertas de seguridad en las salas, en la mejora de la red eléctrica así como en la instalación de extractores, alarmas o detectores de humo. Todo ello gracias a un presupuesto de 75.000 euros.
La importancia de estas salas radica en las dificultades con que se encuentran los jóvenes madrileños para poder ensayar, dada la escasez de locales acondicionados, junto a la falta de medios económicos con que sufragar los gastos. La Comunidad de Madrid, a través de la Dirección General de Juventud, gestiona las salas de Cuzco y otras similares en la estación de Usera. Un buen ejemplo que están asimilando otras administraciones para desarrollar proyectos en esta misma línea. Por ejemplo, la Junta Municipal de San Blas ha creado sus propio local de ensayo en el Parque Paraíso; una iniciativa que se desarrollará en breve también en Moratalaz. Un paso más lo dio la Junta Municipal de Latina al inaugurar, el pasado mes de abril, el primer estudio de grabación municipal para grupos y solistas en el Centro Cultural Almirante Churruca.
El Ballet Español, Beatriz Gil, Pilar López, Susana Hernández, Marisol Rolandi o Mijailova (primera bailarina del ballet nacional búlgaro) han sido algunos de los artistas jóvenes que han pasado por la estación de Cuzco desde su puesta en marcha.
