El Ayuntamiento de Madrid ha destinado más de 3 millones de euros para concluir, antes de que finalice 2007, las obras de la conocida como “estación fantasma” del distrito. Cerrado al público desde el 22 de mayo de 1966, el apeadero formará junto con la Nave de Motores de Pacífico el Centro de Interpretación del Metro de Madrid. Todo un tributo a uno de los elementos más significativos de la arquitectura industrial madrileña que podrá visitarse en breve.