Este porcentaje, aunque supone «una ligera bajada» respecto al 27% de brecha del año 2016, se debe a la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI), ya que en los tramos salariales más bajos hay «muchas más mujeres que hombres: en concreto, 104.000 mujeres más que hombres ganan menos de 1,5 salarios mínimos».
Pese a esta «escasa reducción de la brecha, la diferencia de ingresos sigue siendo de 636 euros al mes a favor de los hombres, equivalente a la cuota media mensual de una hipoteca en la región», ha dicho la secretaria de Igualdad de UGT, Ana Sánchez, en rueda de prensa. Asimismo, en la prestación por desempleo, los madrileños recibían 3,716 euros anuales de media, frente a 3.332 euros de las mujeres, un 10,3% menos.
En las pensiones, la brecha se dispara al 31,5%, ya que los hombres cobraron 20.384 euros anuales frente a los 13.964 euros de las mujeres, de las que 194.000 perciben pensiones de viudedad y la mitad recibe menos de 600 euros mensuales. La brecha es superior a la media del 26,6% en casi todos los sectores, llegando al 40% en los salarios pagados por entidades financieras y aseguradoras.
Como dato positivo, en el sector agrícola las mujeres reciben un salario medio de 12.566 frente a 11.538 euros, lo que representa un 8,9% más, según Fátima Gallardo, de la federación de Industria de UGT Madrid. Las mujeres obtienen «los peores contratos, con menores posibilidades de promoción interna, mientras que los hombres son los más favorecidos en los complementos salariales», como nocturnidad, peligrosidad, y obtienen más gratificaciones como coche o vivienda a cargo de la empresa.
La única posibilidad de obtener mejoras es en la negociación de los convenios colectivos y de los planes de igualdad, aunque la normativa solo los obliga para empresas a partir de 250 trabajadores, algo que se ha rebajado a 150 trabajadores en el convenio del metal, pero sigue siendo insuficiente en un país donde la mayoría de empresas son pymes, según Gallardo.
«A este ritmo, las mujeres tendríamos que trabajar 10 años más que un hombre para llegar a recibir el mismo salario», por lo que UGT pide una Ley de Igualdad Salarial, que incluya sanciones a las empresas que la incumplan, como ya ocurre en Islandia», ha dicho la sindicalista Marina Prieto.
En la Administración autonómica, de 14.250 interinos en la sanidad, 10.000 son mujeres, según Rosa Robledano que considera «muy escasa la presencia femenina en altos cargos, con solo 34 mujeres y 74 hombres en los puestos más altos de la Comunidad de Madrid». De ahí que UGT pida crear «un órgano público que vele por la igualdad salarial», que incluya sanciones y obligue a empresas de más de 25 trabajadores a tener planes de igualad y someterse a auditorías en esa materia.
