La publicación de la carta se hace en plena efervescencia política, coincidiendo con el desencuentro protagonizado por los representantes del comité negociador del Partido Popular y de la formación naranja en la ciudad de Madrid. Dicha reunión tenía por objeto alcanzar un acuerdo de Gobierno entre los distintos partidos adscritos al denominado bloque del centro derecha, encabezando dicha coalición -formada por PP, Cs y Vox- el candidato de los populares, José Luis Martínez-Almeida, quien obtuvo el mayor respaldo en las urnas que los de Begoña Villacís.
Desde el PP son conocedores del interés de Ciudadanos en hacer alcaldesa a su candidata en la capital, sin embargo no esperaban que la agrupación de Albert Rivera les propusiese un Gobierno por turnos: dos años con Begoña Vilalcís y otros dos con Martínez-Almeida al frente del consistorio. El empeño por colocar en el cargo de regidora a la líder de Ciudadanos en la ciudad ha sido criticado por voces internas y externas del partido.
A colación de esta situación, Miguel Ángel Berzal ha asegurado que se encuentra en la encrucijada de abandonar, o no, Ciudadanos: “Aquel que pudo ser y no fue, un partido de libres e iguales que con el paso del tiempo se ha convertido en una maquinaria para detentar el poder, sólo el poder y nada más que el poder”. En este sentido, el aspirante de la agrupación en Pozuelo presenta su dimisión como miembro del Consejo General bajo el argumento de que “se han subvertido los principios elementales de la representación política, falseando las elecciones internas, ninguneando a los afiliados críticos, apartando a las personas valiosas, entronizando a los mentirosos, escupiendo en la conciencia a los valientes”.
