Sin embargo, las siglas populares en la región están, por el momento, bajo la dirección de la ya exregidora autonómica. Es por ello que desde Génova ya han comenzado a engrasar la maquinaria para que el liderazgo cambie de manos, si bien desde la dirección nacional están dispuestos a que su compañera de partido siga ocupando el escaño en la Asamblea.
Así, en los pasillos del PP ya se preparan para la posible implantación de una gestora. Curiosamente, tras la inesperada salida de Esperanza Aguirre, fue la propia Cristina Cifuentes quien presidió este órgano hasta que se celebraron ‘primarias’, siendo esta última elegida como la nueva lideresa de la formación conservadora. Entre los nombres para encauzar la situación estaría el de la propia vicepresidenta de Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, a quien algunos populares colocan ya como cabeza de lista a la Presidencia de la Comunidad de Madrid en las próximas autonómicas.
El exministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, llegó a sugerir en una entrevista en TV3 que Sáenz de Santamaría «tiene una ocasión de oro para medirse electoralmente”, alabando la trayectoria de la mano derecha de Mariano Rajoy. Por el momento, el sustituto temporal de Cifuentes en el Ejecutivo regional, Ángel Garrido, ha manifestado públicamente su conformidad con las medidas tomadas desde arriba. «Acataré, como siempre, lo que decida la dirección», afirmó.
Asimismo, Garrido ha reconocido que está siendo «muy doloroso» para Cifuentes ver cómo se han desarrollado los acontecimientos. Rechazó que haya incumplido el código ético del partido, que le obligaría a dejar el acta. En el partido esperan que no acuda a los actos del Dos de Mayo. Con el mismo tono se expresó el consejero, Pedro Rollán, quien desterró la era Cifuentes para abrir “una nueva etapa”.
