El estudio, que se está desarrollando en la finca La Isla del Instituto Madrileño de Investigación y Desarrollo Rural, Agrario y Alimentario (IMIDRA), trata de evaluar el potencial productivo del melón. Entre otros aspectos, se analizarán los días que tarda la planta en alcanzar los diferentes estados de crecimiento y maduración. El proyecto comprende la evaluación de 40 variedades, 26 de ellas autóctonas de la Comunidad, procedentes de Alcalá de Henares, Chinchón, Patones, Pedrezuela, Titulcia y Villaconejos.
Hoy en día, las antiguas variedades tradicionales de Villaconejos apenas son cultivadas, al haberse visto casi totalmente desplazadas por variedades híbridas más productivas y rentables económicamente. No obstante, gracias al apego de los meloneros tradicionales por sus cultivares, se han podido conservar estas semillas, que han sido prospectadas por el IMIDRA con el fin de no perder tan valioso recurso fitogenético.
Este nuevo trabajo se une a otras investigaciones del IMIDRA sobre el melón, como la participación en el proyecto “Melonomics”, a través del cual un equipo de científicos ha secuenciado el genoma completo del melón para localizar aquellas zonas de su ADN en las que reside la expresión de las características de calidad.
El proyecto “Melonomics” responde al firme objetivo del Gobierno regional de potenciar la competitividad de los productos de la región y, de esta forma, su posicionamiento en el mercado, a la vez que fomenta la producción de productos agroalimentarios de alta calidad, más saludables y más seguros.
Estas investigaciones tienen aplicaciones muy concretas y directas para los agricultores, puesto que con los resultados obtenidos será posible generar nuevas variedades de melón con mayor interés agronómico, es decir, más resistentes a plagas o al estrés del suelo, y además adaptarse a las necesidades de los consumidores.