De esta manera, la nueva estructura gubernamental planteada por la popular, refrendado con la correspondiente publicación en el Boletín Oficial en el día de ayer, aumenta el número de puestos de máxima responsabilidad en la administración autonómica, a repartir entre PP y Ciudadanos, a alrededor de 135.
De acuerdo a la tabla de sueldos en vigor, los nuevos cargos contarán con una remuneración anual bruta de entre 75.000 y 100.550 euros, en función de la categoría. Concretamente, los consejeros percibirán el máximo indicado, mientras que el salario de los viceconsejeros alcanzará los 97.277 euros; por su parte, los directores generales, secretarios y gerentes de organismos y de empresas públicas recibirán cerca de 93.900 euros por su gestión.
Por último, aquellos que ostenten órganos sin personalidad jurídica y comisionados percibirán 75.084 euros. Ya en el año 2019 se incrementó en un 5% el gasto en cuanto al capítulo de nóminas, suponiendo dicho coste un 36% del presupuesto regional.
Desde el Ejecutivo autonómico defienden que el aumento de altos cargos se ajusta a la nueva organización, mediante la cual se busca “ofrecer el mejor servicio”. En este sentido, señalar que el acuerdo de coalición alcanzado por el Partido Popular con la formación naranja ha conllevado que ciertas consejerías se disocien.
Así, Hacienda se ha separado de la cartera de Economía, Educación de Universidades, Transportes de Vivienda y Cultura de Deportes. Esta nueva estructuración ha obligado a su vez a crear nuevas viceconsejerías y demás puestos.
