La corporación municipal debatía en el Pleno una propuesta de los socialistas en la que se instaba al consistorio a elaborar una ordenanza contra la prostitución y la trata de personas. La iniciativa sólo contó con los votos a favor del PSOE, puesto que Ganemos Pinto -que gobierna en el municipio madrileño- como Cs se abstuvieron y PP se pronunció en contra.
La representante popular argumentó la posición de su partido con afirmaciones tales como «la situación familiar que puedan tener esos puteros», «hay personas con discapacidad que utilizan estos servicios porque no les queda otro remedio» y «hay personas que en la vida han nacido feos y no tienen posibilidad de utilizar estos servicios», a lo que añadía que «no somos todos rubios, guapos y bonitos».