El hombre que fue grabado en un vagón de la Línea 10 de Metro de Madrid afilando un cuchillo de cocina es un cortadir de jamón profesional que se dirigía a su puesto de trabajo. Así lo ha avanzado la Policía Nacional después de que las imágenes se hiciesen virales en redes sociales y la compañía activase los protocolos de seguridad. Las autoridades identificaron al varón, dando cuenta a la autoridad judicial de los hechos, por si pudiesen ser constitutivos de delito.
En el vídeo difundido en redes sociales se aprecia al joven sentado solo en unos asientos del vagón afilando un cuchillo de grandes proporciones. En un primer momento se pensó que las imágenes podían haberse grabado con anterioridad a la denuncia de uno de los usuarios de la red del suburbano, ya que no constaban denuncias ni avisos del episodio; de las pertinentes actuaciones llevadas a cabo, se ha comprobado que los hechos tuvieron lugar el mismo viernes, 15 de marzo.
Desde la compañía subrayaron que «no se vivió ningún momento de pánico» en las instalaciones, explicando que el presupuesto de seguridad de Metro se ha incrementado un 20% con respecto al contrato anterior. Dicho aspecto había sido criticado por los sindicatos. La organización de CCOO, a través de su secretario general en Metro, Juan Carlos de la Cruz, advirtieron de la facilidad con las que se puede acceder a la red del suburbano portando armas blancas, ya que no existen detectores en los accesos. Igualmente, el sindicalista interpreta que se han reducido los recursos en materia de seguridad.