El vicepresidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio Aguado, ha reconocido que los datos del paro de agosto son peores que los de julio, que no le gustan, y ha expresado que su Gobierno «inconformista» aspira a seguir siendo motor económico y generador de empleo, aunque no ayude la situación a nivel nacional. Del mismo modo, la Confederación Empresarial de Madrid (CEIM, patronal) ha dicho que la mayor subida del paro en España en agosto desde hace nueve años es achacable a la incertidumbre política a nivel nacional y el hecho de que las únicas medidas laborales introducidas en este ejercicio hayan supuesto fuertes incrementos de costes del factor trabajo, que desincentivan la creación de empleo.
El número de parados registrados en los Servicios Públicos de Empleo en la Comunidad de Madrid subió en agosto en 7.199 personas, un 2,15% con respecto al mes anterior, lo que deja la cifra total de desempleados en 342.709 con un descenso en los últimos doce meses de 11.404 personas, un 3,22% menos. En la rueda de prensa posterior al consejo de Gobierno, este martes, el vicepresidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio Aguado, ha afirmado que la falta de conformación del Ejecutivo central «no ayuda a que haya confianza, inversión o más contrataciones».
«A diferencia del Gobierno de la Comunidad de Madrid, que está en marcha, no tenemos Gobierno con plenas funciones en España, hay un horizonte electoral a dos o tres semanas vista, con lo que eso genera de incertidumbre». «Le pediría a (el presidente del Gobierno en funciones, Pedro) Sánchez que empiece a comprender que su irresponsabilidad a la hora de llevar más de cuatro meses sin poner en marcha un Gobierno afecta a la vida cotidiana de los españoles, y en concreto de 6,5 millones de españoles que viven en la Comunidad de Madrid, ha dicho Aguado. Ante los datos del paro de agosto Aguado ha dicho que a pesar de ser mejores que los del año pasado son peores que los de junio, y ha manifestado que no desea que estos datos «se conviertan en una tónica habitual».
La patronal cree que el ritmo interanual de afiliación en la Comunidad de Madrid es superior en más de medio punto a la media nacional (3,3 frente a 2,6), y que en el último mes la desaceleración es muy similar. Por este motivo, creen los empresarios que el Ejecutivo «estable» de la región permitirá adoptar medidas que ayuden a la revitalización industrial, a afrontar los desafíos de la economía circular, potenciar la contratación indefinida y apostar por la formación dual.
Los sindicatos CCOO y UGT, por su parte, han destacado el dato malo del desempleo en agosto en la Comunidad de Madrid, el peor en la última década, que pone en riesgo a miles de madrileños y hace que la región «pierda velocidad» de crecimiento y aumente la desigualdad en el empleo.
En Comisiones Obreras Madrid (CCOO), su secretaria de Empleo de CCOO de Madrid), Eva Pérez, ha afirmado que hay 342.709 personas, hombres y mujeres, en paro, que a la hora de salir a buscar trabajo encuentran pocas oportunidades y «en la mayoría de los casos se trata de empleo temporal de corta duración y, cada vez más, a jornada parcial, o ambas cosas». Para este sindicato, «tal situación de necesidad humana y de fractura social hace que deba ser situada la precariedad en el empleo en el centro de la actividad política».
En la Unión General de Trabajadores (UGT), su secretaria de Relaciones Laborales, Isabel Vilabella, ha destacado cómo la subida del paro en este agosto ha sido la mayor en la última década, con el 60% del paro entre las mujeres «y aumentando». «Hay que remontarse a agosto de 2009, en plena crisis, para encontrar cifras tan alarmantes en un agosto», ha dicho Vilabella, quien destaca que hace dos años se reducía el paro tres veces más rápido, en 2017 al 9% y ahora solo al 3%. UGT pide la reactivación de las políticas de empleo en la Comunidad de Madrid y la negociación de una estrategia nueva por el empleo, que está perdiendo vigencia, en una mesa de diálogo social en la que estén la patronal, los sindicatos, y el Gobierno regional. Y considera que es necesario también un cambio de modelo económico, desarrollando actividades industriales, que son las que generan empleo de calidad, estable y con buenos salarios.
