Henarsa, sociedad concesionaria de la autopista radial R-2 Madrid-Guadalajara, ha sido declarada en concurso voluntario de acreedores por el Juzgado de lo Mercantil número 5 de Madrid, con una deuda financiera de unos 450 millones de euros.
De esta forma, todas las autopistas radiales de Madrid están ya en proceso concursal, dado que las R-3, R-5 y la R-4 ya se declararon insolventes a finales del pasado año.
Además, con la R-2 ya son siete las vías que actualmente están en concurso del total de nueve que afrontan riesgos de quiebra y que negocian con el Ministerio de Fomento su integración en una sociedad pública de autopistas para solventar sus problemas económicos y financieros.
El sobrecoste que registraron en las expropiaciones de los terrenos sobre los que se construyeron las vías y el desplome de los tráficos por la crisis constituyen los dos principales factores de la situación que atraviesan estas autopistas de peaje, las de más reciente construcción.