Si trastear Malasaña siempre es un placer, el hacerlo pletóricos de electricidad en las vísperas de junio y ya con los calores encima, es el plan perfecto si te gusta el Rock & Roll de verdad y no el postureo de grandes estadios y mainstream.
El 26 en la Sala BUT: Dungen son un grupo que se mueve entre el rock progresivo y la psicodelia siendo su último disco, Häxan, totalmente instrumental, lleno de luz oscura y nieblas traslúcidas; una obra inspirada en la antigua película de Lotte Reiniger: The adventures of Prince Achmed. Imprescindibles. Half Japanese vienen de los lejanos setenta estadounidenses manteniendo lo primitivo de su rabia y la escasez de medios después de más de una docena de discos y cuarenta años de carrera trastabillada. Atom Rhumba dan el toque nacional con otro directo incendiario y crudo.
En la Sala Maravillas toca sesión australiana con el trío Dune Rats, que presentarán su segundo LP: The Kills will know it´s bullshit, y con The Gooch Palms. Ambos una mezcla de neopunk ochentero mezclado con pop gamberro bajo el lema de diversión sin pretensiones. Completa la triada australiana –aunque viva en Denia- Johnny Casino: una mezcla de muchos estilos pasados por un filtro de garaje y un empaque de tres minutos. Por último Vulk, desde Bilbao, con su post punk visceral y turbio.
En la Sala Taboó saltarán Ouzo Bazzoka con todo su exotismo desde Tel-Aviv y su rock psicodélico a caballo entre Oriente y Occidente con el Mediterráneo como guía lisérgico. Fasenuova sorprenderán creando ambientes, a veces épicos y con algo de lírica bestia e inquietante. The Baudelaires llegan con su tan literario nombre desde las antípodas –también- definidos como psych garaje y presentando su primer larga duración: Musk Hill. Dyr Faser, americanos hipnóticos de la educada Boston mezclaran ese sonido, sin embrago tan europeo, cargado de sintetizadores como es el Krautrock. The Love Coffin traerán desde Dinamarca su gótico cabestro tan energético como de negro romanticismo.
En la Sala Changó Live apuntados están Oathbreaker para destrozar ese mito de que los belgas son unos sosos en una de las propuestas más salvajes y metaleras del Festival. King Dude es el personalísimo proyecto de Thomas Jefferson Cowgill, retorcido, sombrío, perturbador, que presentará su última obra, Sex. Emma Ruth Rundle –paradójica esa negrura californiana- traerá toda esa paleta lírica vibrante englobada en el folk noir: un cobijo en la negatividad. Interesantísima. Adrift son pura tralla madrileña, leña sin tregua, en una de las propuestas más clásicas del día.
