Ocho ediciones, ahí es nada, y siempre los mismos titulares. Localidades agotadas… Quince minutos de aplausos. Este año, sin embargo la VIII Gala de Zarzuela de Radio SOL fue especial. Lo comentaba un abonado del Auditorio: "Vengo todas las semanas, nunca he visto una respuesta igual del público". También se asombraban los funcionarios del propio Auditorio, "yo creo que no se llena de esta manera ni cuando viene la Royal Symphony Orchestra…".
Y eso que… a media mañana, todo parecía ponerse en contra. Un tromba de la Orquesta sufría un accidente con su vehículo, a causa del hielo y la anunciadísima Maria José Montiel se caía del cartel, a causa de una inesperada afonía… Así que el equipo de Radio Sol se puso manos a la obra. La excelente soprano Amparo Navarro (que cantó con Plácido Domingo en la Expo de Zaragoza 2008) tomó un tren desde valencia para poder llegar al último ensayo de las 13:30 h. Todo fue en vano. La nieve ralentizó el ritmo del convoy e incluso hubo que cambiar de máquina. Pasaban las 16:30 y la soprano… no llegaba. A las seis de la tarde llegaba Amparo Navarro, exhausta, al Auditorio. La directora Silvia Sanz y el pianista se encerraban con ella en su camerino. Sólo pudieron ensayar dos de sus tres intervenciones en el concierto. Pero daba igual. Llegaba tocada por los dioses y su voz se paseó por la Sala Sinfónica como un ciclón. Su dúo de la Africana con el tenor Enrique Ferrer resultó, emotivo e inolvidable.
Este año, el programa combinaba romanzas muy conocidas con otras menos habituales como Que soy picarona de La Picarona o Al reír de la mañana y Fue en Bailen de La Fama del Tartanero (esta última muy aplaudida por el espectáculo de palmas del coro). El público estaba entregado. Don Jose Mª Alvarez del Manzano, un fijo en todas las ediciones, sentenciaba, "me alegro de haber venido. No me arrepiento de no haber ido al Real". (Se programó un concierto en el Teatro Real ese mismo viernes para inaugurar la Presidencia europea de España). Llegaron los bises.Y el público aplaudiendo a rabiar. Y la Jefa de Sala de los nervios porque había después otro concierto y allí no se movía ni un alma…
