El Gobierno vuelve a someterse este miércoles a la sesión control en el Congreso. Lo hace envuelto en medio de varias polémicas.
La principal cuestión de la sesión de control al Gobierno corre a cargo de Fernando Grande-Marlaska, que cesó al coronel de la Guardia Civil, Diego Pérez de los Cobos; por dirigir una investigación judicial sobre 8 de marzo. Desde el objetivo aseguran que todo es debido a un «motivo de desconfianza».
El propio ministro tendrá que responder sobre este asunto. En su mayoría, todas las preguntas de la oposición dirigidas a Marlaska serán sobre esta medida, donde algunos pedirán la dimisión del ministro. Asimismo, el Informe elaborado por la Guardia Civil establece que se desaconsejaron recomendaciones de promotores del 8-M para que no se celebrara la manifestación feminista.
En un informe de 83 páginas se recoge y estudian declaraciones de testigos que acudieron a la manifestación del 8-M. Además, también cuenta con declaraciones de Fernando Simón en las que se advertía del peligro de la pandemia de coronavirus y las declaraciones de promotores que han declarado para explicar los motivos que les llevaron a cancelar sus actos y eventos programados durante los primeros días de marzo.
El objetivo del informe es saber si por parte de las autoridades españolas «se dieron instrucciones para que no se hiciesen”. Como dato concluyente se subraya “la existencia de llamadas telefónicas por parte de la Delegación de Gobierno a los promotores». Todo ello con la finalidad de cancelar este tipo de actos.
Por lo tanto, no solo Marlaska es el que está en el punto de mira. El acuerdo de PSOE y Podemos con EH Bildu para derogar la reforma laboral sigue generando confusión entre la oposición. Pablo Casado preguntará directamente al presidente del Gobierno sobre esta cuestión después de que, tras el anuncio de acuerdo, se hayan sucedido las rectificaciones y contradicciones entre los partidos del gobierno.