Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.

César Cervera: «El imperio español es la mayor máquina de prosperidad desde el romano»

R3_hOOiN_400x400.jpg

En tu anterior libro Los Austrias: el imperio de los chiflados, presentas a personajes históricos valiéndote de los relatos, anécdotas  y curiosidades ¿Repites dicho esquema en Superhéroes del Imperio -español-?

En el caso anterior, intentaba desmitificar a los personajes, desmitificar la dinastía de los Austrias; quería traerla de las nubes a la realidad. De ahí que caiga en la curiosidad, alejada de los libros socioeconómicos. Se trataba de indagar en la vida, en lo anecdótico de los personajes.

En Superhéroes del Imperio la idea es contar la biografía de estos personajes haciendo un acercamiento más realista. Eso obliga a hablar de anécdotas, que muchas veces ilustran mucho más que hablar de etiquetas. Esto ayuda al lector con un relato más cercano.

La fiebre actual de los superhéroes y el fenómeno americano se basan en la veneración del ciudadano perfecto:  cogen los atributos del ciudadano perfecto americano y lo expresan de manera literaria. Yo analizo cómo el imperio español, siendo en su momento una potencia hegemónica, cogió a una serie de personajes y los proyectó para que sus historias perdurasen en la historia.

 

¿Cuáles son esos atributos que caracterizaban a estos superhéroes españoles?

Se parecen mucho a los americanos. A lo mejor por cercanía, son personajes a los que se les tiene que exagerar. En el imperio español se cogían personajes reales y los exageraban. Cuando los analizas te encuentras con que la vida de algunos personajes del siglo XVI o XVII es como tres veces la vida de cualquier persona de hoy en día; cuando vamos a la realidad de esos personajes vemos que eran prácticamente superhéroes, con capacidades extraordinarias.

Por ejemplo, el primer personaje es Diego García Paredes, conocido como el Sansón de Extremadura. Era un hombre con una fuerza sobrehumana. Se dice que él solo mató a 500 franceses defendiendo un puente. Ahí hay una mitificación porque es muy complicado que un hombre matase a 500 personas. Lo estudio y veo que hay una intención en los cronistas para elevar el número de bajas; lo analizo. En este caso, lo que nos revelan las fuentes es que aunque no mató a 500 personas tenía una fuerza sobrehumana, con una estatura superior a la media de la época, que cogía un mandoble que ninguno de los soldados podía coger. Detrás de este personaje proyectado como un superhombre hay un personaje que es igualmente extraordinario.

En el caso de Francisco de Pizarro participa en aventuras donde llegan a morir entre el 50 y el 60 por ciento de la expedición. Sin embargo, Pizarro siempre sale superviviente. Tiene una biología extrema. Quienes cruzaban el Atlántico tenían una biología de hierro por el simple hecho de cruzarlo. Pizarro fue una persona entre mil. Además, su proeza la consigue cuando es un anciano, cuando todos suponemos que a esa edad está acabado. Si analizamos su persona deducimos que está hecho de otra pasta.

 

¿En qué se diferencia el fenómeno del superhéroe español con respecto a otras potencias europeas de la época?

El fenómeno se repite en la historia de todos los países, en la época romana y medieval. En la época en la que salen estos héroes españoles hay una importancia en el ser humano con el Renacimiento, no la hazaña colectiva sino el individuo; se crean los primeros estados y en éstos tiene que haber un nombre. Ya no se conforman los países con tener a Julio César, sino que cada uno quiere tener a su Sansón y a su Hércules.

Se produce todo este fenómeno, que se ha ido reproduciendo a lo largo de los siglos. El imperio español, que no es pequeño, es una gran potencia durante tres siglos y acabamos teniendo una historia militar que no la tiene ningún país europeo; quizá Inglaterra, pero tampoco le llega a la historia de España.

 

Aprovechando que el discurso de género está hoy en boca de todos, hay que decir que incluyes un personaje femenino en tu libro, la conocida como la Monja Alférez ¿Cómo es esta mujer?

Como pensé que iba a haber polémica con el tema de género pensé que había muchas españolas guerreras que incluir; en el caso de España es habitual el fenómeno de mujer guerrera: desde María Pita, Agustina de Aragón… tenemos una serie de personajes femeninos que son de armas tomar. La duda que tenía era cuántas incluir. Si incluía tres me iban a decir por qué solo tres y no cinco mujeres y cinco hombres. Al final elijo a este personaje, que tiene una capacidad sobrenatural. Además, ese capítulo sirve para homenajear a otras mujeres que tienen dichas características.

 

Retomando el tema de los atributos, has destacado características principalmente físicas, que son con las que muchas veces nos han descrito a los españoles: brutos, bravos, testarudos. Pero ¿hay ejemplos donde brille la inteligencia y estrategia?

Se caracterizan a unos personajes por su físico, pero hay otros que englobo en el oeste español. Cada uno tiene sus cualidades. Cabeza de Vaca tenía una resistencia física de la leche, recorriéndose el sur de los Estados Unidos. Lo hace con inteligencia y sin derramar una gota de sangre; tiene una capacidad para adaptarse a las nuevas lenguas y sin mediación por medio. Hay una mente muy inteligente detrás.

Otro caso es del duque de Osuna, a quien se ve como un gran estratega militar; además es un gran gestor y administrador durante el reinato de Nápoles y Sicilia. También está Alejandro Farnesio, que se pone en la primera línea de combate pero destaca por su inteligencia política en el conflicto entre católicos y protestantes.

 

Sobre el daño causado por la denominada Leyenda Negra en la historia de España ¿Cómo han sido tratados estos personajes por los enemigos de España?

En los últimos 20 años ha habido un redescubrimiento de estos personajes en la historia militar. Hay un auge de este tipo de libros. Se están recuperando, pero un montón de estos personajes no eran reconocidos: nadie conocía a Blas de Lezo, al duque de Osuna. El español medio ha interiorizado tanto la Leyenda Negra que se ha olvidado de estos personajes, que protegían al imperio español, una cosa tan deslegitimada y maldita hoy en día.

Aún tenemos interiorizado que el imperio español fue una fuente de maldad. Yo creo que el imperio español es la mayor máquina de prosperidad desde el imperio romano. Nunca ha existido un imperio que haya traído prosperidad a tantas tierras -tantos caminos, ciudades, universidades, tantos hospitales-. Muchos de estos personajes están manchados por la Leyenda Negra. Lo principal es quitar esa leyenda al imperio español.

Sobre los conocidos como los genocidas americanos, como así se le tachó a Francisco de Pizarro, hay una leyenda bestial detrás que nadie conoce. Soy el primero que cuando me he acercado a su figura lo he hecho con un montón de prejuicios, pero luego descubrí que nada tiene que ver con el personaje. Creo que todos los españoles tenemos interiorizadas la leyenda negra, incluso los que redescubrimos la historia.

Este libro ayuda a acercarse a estos personajes y ver que no tienen ninguna maldad de la que nos hablan en los libros de historia. Muchas veces se escucha que ‘Pizarro fue un gran conquistador, a pesar de…’; siempre hay un ‘a pesar’, cuando no debería tener. Sólo hay algunos episodios que se consideran oscuros, como la muerte de su socio, Diego de Almagro -que es una pequeña guerra civil entre ellos, que no deja de ser una trifulca entre españoles-; y luego la ejecución de Atahualpa.

 

Comentas el auge que ha vivido la historia militar en los últimos 20 años. Teniendo en cuenta esto ¿Cómo ha sido ese proceso de investigación para conocer a los personajes de tu libro?

Ha habido un auge de la historia militar, pero ésta ni si quiera ha llegado a los colegios. Cuando estudie recuerdo el imperio español, pero por anécdotas negativas. En la universidad fui descubriendo a estos personajes, y hasta que los lees sin prejuicios no les quitas el sello.

Personalmente creo que desde la Transición se ha generado una idea de que somos europeos y con el relato del constitucionalismo se ha aparcado el darle importancia a estos personajes. Parece que no ha habido una historia anterior porque ahora somos muy modernos.

Durante el franquismo, que estudiaban nuestros padres, hubo unos personajes de copia y pega. Al final tampoco se conocían. En el siglo XX ha habido un desinterés por generar un relato de la historia de España.

Nos hemos basado en la idea de que la solución está en Europa. Al final nos centramos en la historia europea y descubrimos que tampoco es la solución, porque ha tenido los mismos problemas. Pensábamos que lo bueno sería echar un velo en nuestra historia y es falso, porque nos olvidamos de que nunca ha habido una hazaña como la realizada por España.

 

A modo de pregunta perfil ¿Cuál sería tu Superman o el personaje cuyos mitos se acercan más a la realidad del mismo?

Como si fuese Superman: Álvaro de Bazán, ‘El Invicto’, el que nunca perdió una batalla. Superman es un compendio de virtudes sin un defecto. Lo bonito es acercarse a un personaje y ver que tiene defectos, como en el caso de Bazán, que acometió una ejecución algo extrema contra unos franceses. Acabas encontrando los defectos, y los haces más humanos. A mí Superman me parece un coñazo de superhéroe. Es alguien perfecto, y por eso acudí a Bazán,  al que quise encontrarle su criptonita.

Otro de los personajes más sorprendentes es la Monja Alférez, que es de película su historia. Al final del libro ha matado a 20 personas, totalmente convencida de que debía matarlos.

 

Ya que huyes de la figura de Superman. El superhéroe antagónico es Batman, frío, solitario y muy inteligente ¿Con quién lo compararías?

En el libro hago un símil con Juan Pablo de Carrión, que defendió el norte de Filipinas de piratas y samuráis sin señor. Es el Batman viejo, que no se sostiene y que emprende su última misión, tras acumular varios fracasos. No se sabe de dónde saca la fuerza y junto con su barco y 30 soldados vencen a un millar de piratas. También lo comparo con el viejo Logan -Lobezno-: Carrión, en su juventud, fue un gran guerrero, pero nunca consiguió nada.

 

¿Quizá nos quedamos demasiado con el Capitán Trueno cuando teníamos superhéroes con más contenido en nuestra historia?

Al final, nosotros no hemos estudiado a nuestros superhéroes. Se ha apostado por una historia genérica y europea. En la época de nuestros padres -época del Capitán Trueno-, con Franco, hay personajes de cartón-piedra; no llegas a conocer realmente cómo son verdaderamente. Siempre se ha dicho que de las conquistas de América se podían haber hecho novelas y películas de género único, como en el caso de los western americanos; los western no dejan de ser superhéroes.

Se podía haber hecho una cadena de cómics de los conquistadores de América. Pero ni siquiera en la época del franquismo, que supuestamente reivindicaban personajes de nuestra historia, lo hacían: reivindicaban personajes de cartón-piedra.

 

Loading

Loading

Etiquetas:

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

el distrito tv

lo más leído

Lo más visto

Scroll al inicio