Hasta treinta robos en varios cementerios de la comunidad de Madrid. Es lo que se le imputa a una pareja española de etnia gitana, de 26 y 32 años. Los individuos estaban especializados en saquear los adornos de las tumbas en los camposantos madrileños, entre ellos los de Fuencarral, Carabanchel y La Almudena.
Estas detenciones han tenido lugar en el marco de la ‘Operación Santo’, iniciada en diciembre por la Policía Municipal de Carabanchel. La investigación arrancó después de que varios familiares de difuntos denunciaran el destrozo de ataúdes, robo de elementos ornamentales de sepulturas, marcos de vitrinas y coronas de flores. Al parecer, los objetos metálicos eran revendidos en chatarrerías.
Robo a coches y ancianos
Además, el matrimonio actuaba durante la visita de los familiares de los fallecidos e incluso durante los sepelios. En ese momento aprovechaban para romper cristales de vehículos y hacerse con los objetos de valor de su interior. También se dedicaban a atracar a personas ancianas cuando iban a visitar las tumbas de sus familiares.
Pillados in fraganti
La Policía Municipal de la Unidad Integral del Distrito de Carabanchel detuvo por sorpresa a la pareja el 9 de marzo en plena faena. En su poder tenían varios cristos y otros objetos de las tumbas. Los arrestados han pasado ya a disposición judicial.
