El pasado jueves 12 de diciembre el PP del distrito celebró su tradicional Copa de Navidad. Un acto que contó con la presencia de Manuel Pizarro, quien aportó a los asistentes una visión económica del pasado, presente y futura de nuestro país.
La Presidenta del Partido Popular de Fuencarral – El Pardo, Elena González-Moñux, abrió el acto saludando a los más de 250 afiliados y simpatizantes que se dieron cita, deseándoles lo mejor en estos días tan entrañables de la navidad.
En primer lugar, presentó la figura de nuestro invitado, Manuel Pizarro, de quien afirmó que cuando habla o cuando escribe siempre aporta un rayo de luz donde todo el mundo ve sombras. Tal es así, que fue de los primeros en anunciar que había que revisar el estado del bienestar, diagnosticó que existían organizaciones superfluas en este país, denunció el excesivo gasto en de las administraciones, afirmó que cuando la ley es confusa hay una sociedad ineficiente, y reclamó normas claras y no una maraña de disposiciones legales.
En su intervención, Elena González-Moñux, recordó que la calidad de la educación y el mercado de trabajo han sido dos de los grandes retos que ha tenido que hacer frente el gobierno de Mariano Rajoy, mediante dos reformas legislativas: Reforma Laboral, que ya está dando sus frutos a nivel nacional y sobre todo en la Comunidad de Madrid, y la Reforma de la Educación, que busca atajar los tres grandes problemas de España: la baja calidad, la dispersión territorial y la ausencia de alternativas para los alumnos que no pueden terminar el ciclo educativo obligatorio.
González-Moñux, afrontó el tema de la corrupción política, donde comparte y entiende el malestar existente en la sociedad. Afirmando, que los partidos en general y los políticos en particular deben tener tolerancia cero ante estas situaciones, pero sin olvidar que hay que dejar a la justicia actuar. Estando convencida de que el PP está tomando medidas para acabar con la corrupción en la vida política, para de esta forma volver a tener la confianza de la sociedad. Frente a la actuación tibia del Partido Socialista, quien justifica los ERES de Andalucía o afirma que se está haciendo una campaña de acoso a la UGT, cuando no solo se estaban financiando ilegalmente sino que en las prejubilaciones se incluían a personas que no habían trabajado.
Finalizó su intervención hablando sobre el independentismo de Cataluña, donde comentó que hay que tener unidad y firmeza frente a los desafíos unilaterales, dejando una puerta abierta a la reforma constitucional desde el consenso. “Tenemos que estar orgullosos de ser españoles, sobre todo por la enorme herencia cultural e histórica que hemos recibido por el mero hecho de haber nacido en España” concluyó la presidenta.
"Tiempos de oportunidad"
Por su parte, Manuel Pizarro, inició su intervención dando las gracias por la invitación, para seguidamente analizar la situación económica de nuestro país. En sus palabras, “los tiempos de crisis son tiempos de oportunidad, de hacer las cosas bien, ya que en tiempo de bonanza nos dejamos llevar sin pensar mucho en la situación futura, como le ocurrió al PSOE en sus años de gobierno. Situación que ha obligado una vez más al PP a resolver el problema, como pasó en 1997. Mariano Rajoy se encontró con una España desfallecida, una España que no creía en sí misma, con una España donde la corrupción estalla a borbotones, y una España donde la justicia no es justicia y donde a las fuerzas de seguridad no se les respalda lo suficiente, nos lleva a un estado que no funciona”.
Pizarro añadió que “lo peor que nos ha dejado el PSOE es la crisis moral, como consecuencia de una falta de principios y valores, por una serie de decisiones que han llevado a hacer las cosas mal, que ha dividido a los españoles, mirando donde estaban nuestros abuelos hace 70 años en vez de gobernar para todos los Españoles. Un gobierno no debe crear un problema más de los que se ha encontrado e intentar solventar los que existen, que es lo que está haciendo el gobierno de Mariano Rajoy, y que no realizó el gobierno socialista”.
En clave internacional, comentó que Europa “no nos acompaña, ya que Alemania nos pide que hagamos lo que no hacen ellos en sus bancos. Y somos nosotros los que estamos ajustando la reforma laboral y bancaria. Se tiene que rehacer el sistema financiero, ya que durante años se ha estado jugando a la bolsa con el dinero de los impositores y esto no se puede hacer. Tras el crack del 29 se prohibieron estas prácticas, pero en la época de Clinton se volvió a permitir, y hoy se están tomando medidas para que no vuelva a suceder”.
Manuel Pizarro trasladó su preocupación de que en Europa no se estén tomando las medidas necesarias para disponer de un sistema financiero único. “Se ha generado una libertad de circulación de personas y capitales, se ha establecido la moneda única, pero si no hay un acompañamiento institucional fuerte de todos los países europeos, no podrá funcionar”, expuso. “Pero esta situación –añadió Pizarro- de Europa no exime a España de tener que hacer lo que tiene que hacer, y una vez más ha tocado al Partido Popular solventar el problema financiero, que hemos heredado del PSOE, al no intervenir las entidades financieras en su momento, negar crisis, y obligar a fusionar entidades que iban mal con la que iban bien, contaminando unas a otras. A los que idearon este sistema no se les ha pedido responsabilidades, el PSOE permitió que personas del mundo jurídico y financiero suplieran al Banco de España, en vez de que este realizara su trabajo: vigilar y sanear el sistema financiero”.
Hoy tenemos un sistema financiero solvente, en opinión de Pizarro, “pero sin olvidar que los durísimos test de estrés que se han realizado en España y las condiciones durísimas que nos han aplicado, que no se están haciendo en el resto de Europa, y que nos lleva a pensar que existe una doble vara de medir”.
En cuanto al sistema energético, Pizarro opina que “el PSOE nos dejó un grave problema, de forma que la energía en España tiene un sobre coste de 9.000 millones de euros, a los que hay que sumar otros tantos de subvenciones, a personas con nombres y apellidos que han estado invirtiendo en las energías que quería el gobierno anterior. Y esta situación, o la paga la tarifa o lo paga el contribuyente, lo que supone una sobrecarga a las empresas y un daño a la inversión”.
Sobre el estado del bienestar, comentó el invitado “la necesidad de gestionar bien y en términos de eficiencia, sin dejar a la gente en la cuneta. Es necesario rehacer el sistema de pensiones, ya que la persona que ha cotizado toda su vida tiene derecho a una pensión digna, y para ello hay que reformar el sistema de pensiones”.
Por último, Pizarro reafirmó “la necesidad de reformar las administraciones públicas, ya que al déficit que arrastran es un reflejo de que no funcionan bien. La sociedad pide un comportamiento ejemplar de las personas que componen las instituciones públicas, respondiendo ante la justicia con rapidez el que no actué correctamente”.
Al final del acto se sirvió un vino español, momento en el que los asistentes pudieron saludar e intercambiar impresiones con el invitado, que se mostró agradecido con la acogida demostrada por el PP de Fuencarral-El Pardo.
