Uno de los asaltos tuvo lugar en una pastelería ubicada en el número 26 la calle Ginzo de Limia, en el barrio del Pilar, donde una banda de encapuchados rompió la persiana para acceder al interior, sin embargo no se llevaron nada. Posteriormente, se dirigieron a un restaurante ubicado en la misma vía, concretamente a la altura del número 56; tras destrozar la cristalera, reventaron la máquina tragaperras y huyeron del lugar con un botín de 1.000 euros.
En la madrugada del jueves se registraron otros dos asaltos en el distrito de Carabanchel. Un grupo de ladrones llegó a un bar situado en la calle Yébenes montados en un vehículo de alta gama. Una vez los individuos destrizaron el cristal, forzaron la caja registrado y la tragaperras y vaciaron su contenido, en torno a 1.000 euros. Otro asalto tuvo lugar en un local de comida rápida situado en la calle Pinar de San José número 10. Los cacos, que también venían con un vehículo de alta gama, rompieron el cristal de la entrada y se llevaron dinero de su interior y varios jamones. Otro establecimiento de la calle Azabache también fue objetivo de los ladrones en la misma noche.