La situación del acceso a los barrios de Tres Olivos y Montecarmelo desde la carretera M-607 a Colmenar es una de la preocupaciones de los vecinos de esta zona del distrito. Tras muchas denuncias de afectados que quedaban en agua de borrajas, la Asociación de Vecinos de Montecarmelo comenzó a moverse hace 6 meses para conseguir una solución a los atascos diarios que sufren en las horas punta. Se crean en el enlace entre la carretera y estos nuevos barrios. La calle Nuestra Señora de Valverde funciona como un ramal que llega a la rotonda que une estos puntos. Un ramal que, a pesar de ser ancho, tenía sólo un carril, por lo que se creaban unos atascos que llegaban a la M-607.
“En un mismo punto confluyen 4 factores que provocan estos atascos -ha explicado a EL DISTRITO Alberto Navazo, presidente de la A.V. de Montecarmelo-: Una curva peligrosa en bajada, la entrada a la vía de servicio de Mirasierra, la entrada a una gasolinera y el ramal de acceso a la rotonda. Además, al ser bajada, los coches suelen llegar a la zona con mucha velocidad, por lo que tras la curva se encuentran todo de golpe”.
Tras numerosas denuncias, la asociación de vecinos se reunió con la Guardia Civil de tráfico, que no tenía competencia en la zona. Se entrevistó después con la Policía Municipal, que, tras estudiar la situación, ha tomado una medida temporal. “Los agentes estuvieron en la zona en la hora punta, y vieron el problema. Lo que han hecho es poner dos carriles en el ramal de unión que, aunque era muy ancho, sólo tenía uno. La situación ha mejorado, pero tenemos claro que esto es sólo una solución temporal”, afirma Alberto.
Lo que quieren los vecinos es que se realice el proyecto que se les mostró en su día y que debería ya estar hecho. “Con este proyecto se prolongaría la vía de servicio que ahora muere en Mirasierra y se construiría un segundo puente de acceso, con aceras”. Las obras no se han llevado a cabo por la situación económica actual, pero la asociación seguirá luchando, ya que es un acceso “cada vez más necesario, dado el incremento de tráfico que está teniendo el barrio, en el que viven ya 15.000 habitantes”.
