Numerosos vecinos de la PAU de Las Tablas se han quejado del "peligroso e inadecuado" carril bici habilitado desde hace un mes en diferentes calles del barrio, según diferentes testimonios.
El carril bici ha consistido en pintar líneas separadoras para uso exclusivo de bicicletas. La solución adoptada en la calle Castillo de Candanchú ha consistido en un carril ciclista pegado a la acera y la banda de aparcamiento fuera, es decir, entre el carril bici y el de normal circulación de vehículos.
En cambio, la solución adoptada en la calle Puente de la Reina y otras ha consistido en un carril bici pegado a la banda de estacionamiento y, por tanto, anexo al carril de libre circulación de vehículos. Además, en otras calles del barrio han colocados símbolos de carriles mixtos de coches y bicis recordando que la velocidad máxima es de 30 kilómetros hora.
Precisamente, muchos vecinos critican que no se haya adoptado una solución igualitaria en toda el barrio, lo que provoca la confusión de algunos conductores que aparcan o circulan por el carril bici sin darse cuenta.
Concretamente, residentes de la calle Castillo de Candanchú, de más de un kilómetro de longitud, están molestos por la "escasa visibilidad" que tienen a la hora de salir con sus vehículos de los aparcamientos de sus edificios, ya que deben invadir el carril bici y el carril de estacionamiento para advertir la presencia de vehículos antes de salir, lo que ya ha provocado varios amagos de colisiones.
Otros residentes también se quejan que la calle, que anteriormente contaba con dos carriles en cada sentido, ahora se queden en dos, puesto que han habilitado un carril bici y otro de aparcamiento en ambos sentidos de la vía.
Desde la asociación de vecinos consideran que esta decisión ha podido verse motivada por la idea de evitar carreras de coches o las altas velocidades de algunos conductores, que había hecho peligroso hace tiempo para los peatones cruzar para los pasos de cebra de esta calle. Pero esta problemática había quedado resuelta con los badenes instalados hace meses, consideran los vecinos.
La solución adoptada en la calle Puente de la Reina, Camino de Santiago y aledañas tampoco gusta a los vecinos, ya que su distribución está generando "situaciones de poco visibilidad para ciclistas y conductores" en las bifurcaciones, unido a la misma queja de reducción de los carriles para los vehículos, teniendo en cuenta "los pocos ciclistas que están circulando por aquí".
"Es un peligro para los propios usuarios de la bici pasar de la Camino de Candanchú a otra calle porque los carriles cambian de sitio y es un lío. Además, muchas motos utilizan el carril bici para ir más rápido", ha señalado María Palacios, una joven residente en el barrio.
