Manuela Carmena se ha referido así en la comisión municipal de Cultura y Deportes al nuevo contrato de Madrid Destino para que la enseñanza de tauromaquia en la venta de Batán, espacio de titularidad municipal, continúe al menos hasta junio de 2019, poniendo fin a la situación alegal de la escuela Marcial Lalanda, que se negó a abandonar las instalaciones cuando no se renovó el contrato anterior en enero.
La alcaldesa ha dicho que su Gobierno no quiere que el Ayuntamiento subvenciones esa escuela de tauromaquia pero, ha dicho, hay «un acuerdo de Pleno» hasta el momento imposible de modificar porque su grupo no ha tenido «consenso» que implica que la Venta del Batán se dedique a la tauromaquia.
«Estamos en el tiempo que estamos», ha indicado Carmena para acto seguido citar una recomendación «clarísima» de Naciones Unidas para prevenir los efectos perjudiciales de la tauromaquia que se pronunciaba de forma expresa contra la participación y la asistencia de menores a festejos taurinos.
Carmena asegura haber intentado que la Comunidad de Madrid asuma la gestión de ese local para albergar su Escuela de Tauromaquia y se ha mostrado convencida de que «al final se llegará un acuerdo». Por parte del PP, la edil Carmen Castell ha dicho que el Gobierno municipal, con sus posiciones sobre la tauromaquia, ha despreciado una «afición popular» y ha censurado la promoción turística de los toros, aunque finalmente no ha tenido más remedio que rectificar y firmar un acuerdo para la Venta del Batán gracias a «la heroicidad» de los defensores de la escuela.
Este mes se ha conocido que Tauromaquias Integradas, sociedad dirigida por el torero retirado José Miguel Arroyo «Joselito» ha recibido un contrato por una vigencia de 12 meses -a partir del pasado mes de junio- para impartir un temario teórico sobre la historia de la tauromaquia sin usar animales por un importe de 65.000 euros.
