Chavela Vargas se ha marchado a los 93 años de edad, después de una intensa vida en la que pasó de las mieles del éxito al descenso del olvido, para renacer sobre sus cenizas a partir de los años 90, convirtiéndose en una artista de culto con sus canciones de siempre y con nuevos temas musicales que afloran los sentimientos más humanos. La alcaldesa de Madrid, Ana Botella, ha calificado a Chavela como “una figura irrepetible. Ha tenido una vida intensa, plena y ha llegado hasta el final de sus días cantando. Chavela era en realidad tan española como mexicana, como latinoamericana. Madrid es una ciudad iberoamericana” Vargas encontró en España su resurgir a la música y el redescubrimiento popular. El Gobierno español la distinguió en el año 2000 con la Gran Cruz de Isabel la Católica. Su última actuación fue en Madrid, de la mano de Martirio y Miguel Poveda presentando su trabajo “Luna grande”, un homenaje a Federico García Lorca, en el que Chavela musicalizó los poemas del poeta granadino, y su libro ‘Dos vidas necesito. Las verdades de Chavela’
