Hasta este año el Ayuntamiento de Madrid tenía establecida una contribución especial para el servicio de bomberos, que a partir del próximo año se ha convertido en tasa, sin alteración alguna de su cuantía. De ahí que, ante las informaciones aparecidas hoy en el diario Expansión asegurando que se iba a crear un nuevo impuesto sobre el servicio de extinción de incendios, el Ayuntamiento de Madrid niega rotundamente la información y asegura que, en ningún caso, se trata de una nueva figura impositiva, sino tan sólo de un cambio en la naturaleza jurídica de lo que hasta ahora ha sido una contribución especial.
La Tasa de Servicios de Emergencias no representa alteración alguna en las cuantías a satisfacer por las entidades aseguradoras: antes pagaban por la Contribución Especial por la instalación, ampliación o mejora del servicio de extinción de incendios el 5% del importe de las primas recaudadas en el ramo de incendios y a partir del 2012 van a satisfacer también el 5 % de las primas pero ahora como Tasa por el mantenimiento de los servicios de emergencia que presta el Cuerpo de Bomberos. De hecho el establecimiento de la tasa se ha negociado con las entidades aseguradoras y éstas han dado su conformidad.
Otro de los errores del artículo de Expansión es afirmar que "las aseguradoras deberán aportar hasta 90 millones de euros". El coste del servicio previsto para 2012 es de 85 millones de euros, lo cual no significa nunca que esa sea la cantidad que habrán de satisfacer las aseguradoras que será, como se ha reiterado, del 5 % de las primas. El origen del error puede estar en que, tal y como establece la Ley Reguladora de las Haciendas Locales, el importe de las tasas no puede exceder del coste real o previsible del servicio, que en el estudio económico preceptivo para el establecimiento de la misma se fija en 85 millones de euros. Sin embargo, la recaudación por la tasa supondrá un importe equivalente al de la contribución especial (29 millones de euros), el 34% del coste total del servicio.