La investigación comenzó a finales del mes de agosto, cuando los agentes analizaron varias denuncias que respondían al mismo modus operandi: hurtos al descuido cometidos en centros sanitarios por un varón que usaba una muleta. Una vez que los agentes identifican al individuo, comprueban que el mismo padece una enfermedad degenerativa en la pierna y es por ello que utilizaba la muleta, con la cual pasaba desapercibido en el interior de los centros de salud.
En el interior de los centros de salud, aprovechaba el estado convaleciente de sus víctimas para hurtar al descuido distintos efectos, llegando a robar a enfermos que estaban recibiendo tratamientos oncológicos. Fruto de los hurtos que cometía realizó varias estafas usando tarjetas bancarias de algunas de sus víctimas, con ellas hacía compras por pequeñas cuantías. Además, los agentes se percataron de que el sujeto identificado como presunto autor de los hurtos coincidía con el el denunciado por un robo en la taquilla de un gimnasio.
Un reloj valorado en 4200 euros
Los investigadores constataron que el detenido logró entrar en un gimnasio para robar en la taquilla de un cliente diversos objetos, valorados alrededor de 7000 euros en conjunto, entre ellos, un reloj de 4200 euros. Además consiguieron averiguar que había vendido en un local de compra venta de oro el reloj robado en el gimnasio, el cual fue localizado, incautado y entregado posteriormente a su legítimo propietario. El valor total de los sustraído, entre centros sanitarios y el gimnasio, gira en torno a 12000 euros. Tras una ardua labor de investigación, los agentes lograron identificar, localizar y detener a al presunto autor que fue puesto a disposición judicial.
