Analizar, crear criterio propio, exponerlo, defenderlo, rebatir. Eso y mucho más entraña un debate. Todo eso se aprende y todo eso se ejercita. Desde hoy y durante el fin de semana, se celebra el Torneo Intermunicipal de Debate Escolar, una iniciativa que cumple su cuarta edición de la mano de la Universidad Francisco de Vitoria y en la que colabora activamente el Ayuntamiento de Madrid, entre otras cosas coordinando la participación de los centros escolares públicos, concertados y privados de la ciudad.
Charo Sanz, directora de Familia, Infancia, Educación y Juventud, del Área de Equidad del Ayuntamiento de Madrid, ha compartido mesa inaugural con alcaldes y concejales de Majadahonda, Boadilla del Monte, Las Rozas y Pozuelo. Durante tres días, 41 equipos de cinco miembros cada uno, más el apoyo de otros compañeros y profesores de sus colegios, debatirán sobre un tema que eligieron previamente por votación de todos los participantes a finales de enero. En esta edición el tema elegido ha sido “Nuevas tecnologías: oportunidad o amenaza en la sociedad actual”. Los participantes son estudiantes de 4º de ESO o de primero de bachiller de distintos colegios de la región, de ellos 17 son centros de la capital, coordinados por los servicios de Educación del Área de Equidad, Derechos Sociales y Empleo, que ha incluido esta iniciativa dentro de las actividades de Madrid, un libro abierto. “Creemos que el debate es una herramienta educativa y lúdica de estímulo y motivación del alumnado, por no decir lo que aporta en cuanto a la enseñanza de trabajar en equipo”, afirma Charo Sanz.
Por ese motivo el Ayuntamiento se adhirió a este torneo desde su segunda edición. “Empezamos como proyecto piloto en el que participaron siete u ocho centros”, explica Sanz. La acogida fue tan buena entre la comunidad escolar que se ha ido incrementado el apoyo, la implicación y, con ello, la participación. Hoy son 17 los centros de la capital que saltarán a la escena del debate. El año pasado fueron colegios también de Madrid ciudad los que se alzaron con los dos premios a centros y también con el que se otorga, a título individual, al mejor orador. Los premios incluyen un curso de oratoria, sufragado por la Universidad, más, en el caso del Ayuntamiento de Madrid, una placa conmemorativa. Cuatro técnicos de educación del Ayuntamiento madrileño forman parte del jurado.
Más de 120 debates
Los debates, de 34 minutos cada uno, se suceden a lo largo de los tres días y rondan los 120 al final de la cita. El equipo que gane habrá pasado por siete rondas en las que el Jurado habrá podido evaluar no sólo sus conocimientos sino también la expresión corporal y gestual, la oratoria, la dramatización, los recursos, la vocalización. “Son muchos aspectos enriquecedores – indica Charo Sanz– que sirven para todas las facetas de la vida y que hace que este torneo se convierta para los participantes casi en una actividad extraescolar más mientras lo preparan”.
Esa preparación es intensa desde finales de enero, fecha en la que se conoce la pregunta en torno a la que girarán los debates, y el momento decisivo: el torneo. Son tres meses de búsqueda de información, ensayos, contraste de opiniones. Porque todo cuenta, todo suma y de todo se aprende. “Tras cada debate, el jurado decide el ganador y luego se produce un feed-back en el que se explican los aspectos en los que han de mejorar, los porqués de la decisión del Jurado. Se trata de que aprenden de todo”, comenta la directora.
Desde su primera edición más de medio millar de alumnos han pasado por el torneo y cerca de medio centenar de centros educativos principalmente de Madrid, Las Rozas, Majadahonda, Boadilla del Monte, Pozuelo de Alarcón y Torrelodones.
