El próximo 9 de noviembre se cumplen 25 años de la caída del Muro de Berlín. Madrid se suma a la conmemoración de este hecho que cambió el destino de Europa y del mundo con varias iniciativas, entre las que destaca la iluminación que convertirá por unos días la Puerta de Alcalá en la Puerta de Brandenburgo.
La alcaldesa, Ana Botella, acudió ayer al emblemático monumento madrileño, acompañada por el senador y alcalde responsable de asuntos de Interior y Deportes de Berlín, Frank Henkel, para ver de cerca las proyecciones de imágenes que recuerdan la división de Alemania hasta el momento en que le presión ciudadana acabó por vencer el Muro. “Unidad, justicia y libertad” es el lema que presidirá la Puerta de Alcalá hasta el próximo domingo, “como símbolo imborrable de los lazos de amistad entre nuestras ciudades”, ha destacado Botella.
Dos muestras en CentroCentro, inauguradas por la alcaldesa, recuerdan también esta efeméride. La primera, “25 aniversario de la caída del Muro de Berlín”, es un recorrido fotográfico y documental por la construcción, vida y caída del Muro. La segunda, “Hungría: la libertad esculpida” trata sobre los acontecimientos políticos de 1988 y 1989 que impulsaron el desmoronamiento del bloque comunista. Otros espacios culturales, como Cineteca o Matadero, se unen también a esta conmemoración de este hecho que, en palabras de Ana Botella, “puso de manifiesto que la dignidad de las personas no es un privilegio, sino una demanda universal”.
La alcaldesa recordó los lazos que unen a las dos capitales. “Este acto es una nueva muestra del contacto que hemos mantenido ambas ciudades durante los dos últimos años para conmemorar otro 25 aniversario: el del hermanamiento de Madrid y Berlín”. Ambas urbes “se han reunido hoy para reivindicar la libertad y la dignidad de la personas frente a quienes se apropian de su voz y su voluntad para poner en pie proyectos de división y confrontación”.
