El Ayuntamiento de Madrid ha celebrado durante la mañana de ayer, domingo 4 de junio, el Día Mundial del Medio Ambiente con diversas actividades en Pasea Madrid, en el paseo del Prado, centradas este año en la promoción de la alimentación sostenible y el Pacto de Milán, bajo el lema “Alimenta Madrid”.
A lo largo de la mañana el paseo del Prado se ha llenado de actividades para mayores y pequeños organizadas por entidades ciudadanas, comunidades educativas, organismos oficiales y Ayuntamiento de Madrid. Talleres informativos y participativos sobre alimentación y medio ambiente, talleres de nutrición y cocina, un mercadillo agroecológico, puntos de información sobre parques agrarios, reparto de plantel ecológico y siembra de semillas ecológicas han sido algunas de las actividades desarrolladas.
El objetivo de la jornada ha sido compartir las acciones que desde ONG, entidades ciudadanas, comunidades educativas, organismos oficiales y Ayuntamiento de Madrid se están desarrollando para que la ciudadanía madrileña pueda optar a una comida saludable y producida en un entorno cercano, promoviendo así la economía de proximidad y rebajar la huella ecológica de la producción alimentaria. En el mismo sentido, Nacho Murgui, delegado de Coordinación Territorial y Cooperación Público-Social del Ayuntamiento ha apuntado “que éste es un día vinculado al Pacto de Milán, con el propósito de garantizar el acceso a una alimentación más sana, más segura, más saludable, de proximidad y que contribuya a reducir la huella ecológica en todo el mundo en cuanto a la producción y distribución de los alimentos”.
Estos son los objetivos del Pacto de Milán, que ha protagonizado hoy la celebración del Día Mundial del Medio Ambiente en la ciudad de Madrid. En octubre de 2015 el Ayuntamiento firmó el Pacto de política alimentaria urbana de Milán, un acuerdo auspiciado por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) que ya han suscrito más de 100 ciudades de todo el mundo.
El pacto aboga por que las ciudades impulsen sistemas alimentarios sostenibles, inclusivos, seguros y diversificados que aseguren comida sana y accesible a toda la población.
Por su parte, Inés Sabanés, delegada de Medio Ambiente y Movilidad, ha señalado que “Madrid cuenta con buenas herramientas para alcanzar los objetivos del Pacto de Milán a través de la red de huertos escolares y comunitarios. Madrid cuenta actualmente con 150 huertos escolares y 25 comunitarios en funcionamiento, proyectados estos últimos hacia 50. Asimismo se trabaja con toda una estrategia de prevención, reducción, reutilización y reciclaje de residuos que contribuye al cambio necesario en las ciudades”. Sabanés ha lamentado que «este día coincida con el anuncio reciente de Donald Trump de abandonar el Acuerdo de París, mientras la mayoría de ciudades americanas, colectivos organizados y sociedad civil abogan por cuidar y preservar el planeta”.
Desde el Ayuntamiento de Madrid y para seguir los compromisos adquiridos, se está elaborando una estrategia de alimentación sostenible, situando la participación ciudadana (a través de talleres de participación abiertos) y la coproducción de políticas públicas como uno de los ejes fundamentales de actuación. Una estrategia de alimentación sostenible en términos sociales, medioambientales y de salud que permita coordinar de forma más eficiente las políticas municipales en la materia. Además, ya se han puesto en marcha algunas políticas orientadas a cumplir los referidos objetivos:
- Ampliación de la red de huertos urbanos comunitarios.
- Mejora de la distribución de productos alimentarios agroecológicos y de proximidad mediante la instalación puntual de mercadillos de proximidad en algunos distritos, como el distrito Centro.
- La iniciativa Mares, uno de cuyos proyectos, el de Villaverde, se centrará en la creación de iniciativas económicas que proporcionen alimentos de proximidad, de temporada, ecológicos y de comercio justo.
- Incorporación de criterios de mejora de la alimentación en los menús de las escuelas infantiles municipales.
- Talleres de formación sobre seguridad alimentaria dirigidos a las niñas y niños en edad escolar.
- Experiencias de compostaje comunitario previas a la futura implantación contenedor de materia orgánica doméstica.
