La Policía Nacional han detenido a Alexander S. como presunto autor de once estafas realizadas a través de Internet en apenas un mes. Contactaba con sus víctimas en foros con las que acordaba un trueque entre productos o una compraventa y, cuando recibía el artículo pretendido o la transferencia bancaria, él enviaba a cambio objetos de mucho menos valor, como libros.
La investigación comenzó el pasado mes de enero a raíz de una denuncia presentada en la Comisaría de Distrito de Moncloa – Aravaca en la que un hombre afirmaba haber sido estafado por otro con el que había contactado por Internet en un foro de compraventa. Ambos habían pactado un trueque de dos equipos fotográficos. El denunciante cumplió con su parte y envío su set de fotografía pero el ahora detenido, en lugar de mandarle su equipo, le remitió una caja que contenía un libro.
Los agentes del Grupo de Policía Judicial iniciaron las gestiones para poder identificar al presunto autor de la estafa, gracias a varios anuncios de compraventa que había colgado en Internet. Los policías consiguieron interceptar al ahora detenido cuando acudía a una cita. Tras identificarle comprobaron que en portaba en una mochila un equipo fotográfico compuesto por una cámara, un objetivo y varias baterías, así como una factura a nombre de uno de los denunciantes estafados, motivo por los que los policías procedieron a su detención. Los investigadores descubrieron que el ahora detenido había estafado al menos a otros diez usuarios de estas páginas web en distintos puntos de la geografía española. Igualmente, pudieron constatar que incluso había falsificado extractos bancarios para hacer creer a sus víctimas que les había devuelto el dinero con el objetivo de que estos quitaran las denuncias formuladas contra él.
Utilizaba dos variantes de un mismo “modus operandi”
Alexander utilizaba dos variantes de un mismo “modus operandi”: uno de ellos consistía en ofrecer por medio de anuncios y páginas web tanto equipos de fotografía como consolas de videojuegos de última generación. A continuación, los interesados procedían a pagar estos productos mediante transferencia bancaria pero nunca llegaban a recibir los artículos.
El segundo de los métodos consistía en pactar con las víctimas el trueque del artículo ofertado en algunas páginas de Internet. A la hora de realizar los envíos, el detenido procedía a mandar artículos de escaso valor económico como libros, en vez de enviar los objetos acordados. No obstante, él sí recibía el artículo que las víctimas se habían comprometido a enviarle.
