El mercado tradicional recupera el protagonismo en la vida del barrio de Argüelles que tuvo durante el primer tercio del siglo pasado y que Pablo Neruda, vecino de la cercana Casa de las Flores, evocó en sus versos: "Todo eran grandes voces, sal de mercaderías/ aglomeraciones de pan palpitante/ mercados de mi barrio de Argüelles…". Voces que volverán a ser realidad y que el alcalde de la Ciudad, Alberto Ruiz-Gallardón, ha recordado hoy durante la visita a las obras de este espacio comercial, en el que ya funcionan los 19 puestos tradicionales.
Gallardón ha recorrido el mercado de Argüelles, rehabilitado y revitalizado gracias a un proyecto que respeta y devuelve toda su singularidad estética a un edificio proyectado en 1942, a la vez que mejora su capacidad, distribución, accesos y los servicios que ofrece a comerciantes y usuarios. El mercado ha recibido cerca de 1,2 millones de euros en subvenciones, detalló el alcalde. Una cantidad que ha permitido promover, junto a las aportaciones de los propios comerciantes y los 400.000 euros con que ha participado la Comunidad de Madrid, una inversión total próxima a los 3,9 millones de euros.
Cuenta con una superficie de 3.262 metros cuadrados, de los que 1.100 corresponden a la planta principal, en la que se ubican los puestos tradicionales. La planta baja, explicó Gallardón, albergará un supermercado de 940 m2 y la primera, una academia de música de 369 m2. El resto está ocupado por cámaras frigoríficas y aseos.
"La próxima reapertura del mercado Argüelles", aseguró Gallardón, "manifiesta la apuesta del Ayuntamiento de Madrid por recuperar, modernizar y adaptar a las nuevas demandas de los ciudadanos un concepto tan vinculado a Madrid como es el mercado de barrio". La clave de esa transformación radica en mejorar su competitividad frente a otros formatos comerciales, proporcionando la máxima calidad en todos los servicios. En su opinión, el hecho de que los puestos tradicionales y la mediana superficie compartan un mismo espacio hace que se complementen y potencien mutuamente. Aumenta así el atractivo y la variedad de todo el mercado, "fomenta una mayor afluencia de público, y favorece la reactivación económica y social de todo el entorno".
