Este colector evitará el colapso de la red de aguas residuales de los distritos de Moratalaz y Puente de Vallecas cuando se produzcan fuertes lluvias. Cuenta con 3,4 metros de diámetro y casi 2,5 kilómetros de longitud, y con él se aumentará en un 40% la capacidad de recogida de estas aguas.
Su trabajo se unirá al de dos colectores tributarios que se ubican en la Avenida de Moratalaz y la del Doctor García Tapia.
Las obras en la Avenida de Moratalaz son de una gran envergadura, ya que han sido excavaciones de alrededor de 600 metros, hasta conseguir la conexión con el colector de Abroñigales, a la altura de la M-30.
Una vez finalizadas las obras, que será en este segundo semestre del año, los colectores estarán conectados con el by-pass de Abroñigales para, en caso necesario, derivar sus aguas al estanque de tormentas del mismo nombre.
El alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, ha visitado recientemente las obras junto a las concejales de los distritos afectados. Durante la visita ha destacado la importancia de esta obra que, pese a que tiene “poca visibilidad política”, es fundamental para el desarrollo de los barrios.
En los últimos 8 años, el Gobierno de Madrid ha destinado cerca de 1.200 millones de euros en el desarrollo de la red hidráulica. Unas obras que realmente comenzaron hace tres siglos, cuando Madrid tuvo su primera red de alcantarillado. En el siglo XIX llegaron los primeros colectores que son los que forman la base del sistema actual. Hoy la red de alcantarillado suma 4.500 kilómetros.