Se acerca la segunda edición del Mad Cool con un despliegue de más de sesenta artistas de primera línea nacional e internacional dentro de un festival que además de lo musical, busca la convivencia de diferentes disciplinas artísticas. Así, como ya hicieron el año pasado, han puesto en marcha el Mad Cool Gallery que, aunque centrado en la fotografía y la pintura con el ánimo de dar un empujón y visibilidad a toda esa efervescencia aún no conocida, se abre también a la creación de espacios efímeros para determinadas localizaciones del festival ya sea desde una óptica decorativa como de funcionalidad en sus instalaciones.
Lo que sí será novedad en esta edición serán los previos para ir calentando motores y extender tentáculos por Madrid en lo que han llamado Escenarios Mahou & Mad Cool, un ciclo de tres conciertos en salas clásicas de la capital que ya arrancó el grupo Cannibals, cachondos y bailongos, en la Siroco el 19 de abril, ejerciendo de flamantes ganadores del concurso de talentos montado por la organización para que bandas emergentes tuvieran la oportunidad de actuar en un festival de primera línea.
Tengo que decir que yo ya me he adelantado un poco a esa propuesta y ya me fui a ver a los Chelsea Boots al Teatro Barceló donde activaron un sold out, increíble si tenemos en cuenta que ni siquiera tienen un primer disco editado. La sorpresa fue monumental: puro rock & roll y pura actitud con un desparpajo y una juventud insultante. Es el grupo en el que todos hubiéramos querido estar si tuviésemos veinte años menos.
Pero pasemos al grueso del festival donde aún queda una última confirmación que anda disparando las apuestas en las redes sociales, más dirigidas por los propios gustos que por otra cosa. Los abonos se han volatilizado ya a primeros de marzo, con cuatro meses de antelación, y las entradas de día en estos últimos días de abril.
Una de las razones del éxito del Mad Cool dentro de la burbuja festivalera que no tardará mucho en explotar, pues aquí cada pueblo quiere tener su sarao, es trabajar la exclusividad; y así los tres cabezas de cartel serán de actuación única en España y después de años sin caer por estos lares: Foo Fighters, Green Day y Kings of Leon. Tres imprescindibles.
