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Kazajstán: Hacia un segundo Dubai

Un experimento inusual para el espacio postsoviético fue lanzado por Kazajstán el 1 de enero. El Centro Financiero Internacional comenzó a operar en la república, fruto de una idea aparentemente utópica, que hoy adquiere contornos cada vez más precisos y bastante reales, provocando el interés de los países vecinos y aquellos a los que, de hecho, se dirigió a los inversores.

La velocidad de la implementación del proyecto es impresionante y tiene un mensaje inequívoco para la comunidad empresarial internacional. Para Kazajstán, esta es un área muy importante donde crea las condiciones ideales para sus socios.Y la gravedad de lo que está sucediendo está determinada por la supervisión personal del Presidente de Kazajstán, Nursultan Nazarbayev. ¿Y qué otras garantías son necesarias?

Las «condiciones ideales» para los socios aquí no son de ninguna manera una rotación formal de voz. Juzgue  por si mismo. Especialmente para trabajar con inversores extranjeros en Kazajstán, se creó una empresa nacional, Kazakh Invest, que ayuda a los empresarios que desean trabajar en el país a elegir el mejor nicho. Sin retrasos burocráticos y barreras idiomáticas. Casi todos los procedimientos en papel que la empresa asume y se comunica con los posibles inversores en su idioma – todos los servicios de consultoría, impuestos y procedimientos aduaneros están traducidos al inglés.

Además, hay un Centro de Servicios para Inversores en Kazajstán. Funciona según el principio de «ventana única». Es decir, llegar e inmediatamente en un lugar emitir todos los documentos. Los derechos de los empresarios extranjeros están protegidos por el ombudsman de inversión. Y para los inversores hay varias preferencias e incentivos fiscales, por ejemplo, exención del IVA cuando se importan materias primas y materiales, y cuotas para la importación de su propia mano de obra.

Puede enumerar por un largo tiempo. La política de inversión de Kazajstán se formó durante los 26 años de independencia por ensayo y error. Y porque ahora ya está cuidadosamente pensado y lo más detallado posible. Y si es necesario hacer una lista, cuando la posición de Kazajstán en la calificación internacional refleja la comodidad de las condiciones para el emprendimiento en el mundo, Doing Business habla por sí mismo. 36  lugar entre 190 estados. Los mejores indicadores en el espacio postsoviético, junto con Rusia. Al mismo tiempo, en ciertos puestos, Kazajstán ha superado no solo a los países de la antigua URSS, sino también a muchos países desarrollados. Por ejemplo, en términos de protección de los inversores minoritarios, Kazajstán ocupa el primer lugar en el mundo. Y en la ejecución de contratos – en el sexto.

Todas las condiciones creadas para los inversores tienen un reflejo real en las cifras de entrada de capital extranjero. Por ejemplo, solo en el primer trimestre de 2017 los inversores invirtieron en Kazajistán en casi un 19% más que un año antes. Como resultado de enero-marzo de 2017, el ingreso total bruto de inversión extranjera directa ascendió a 5.381 millones de dólares (datos del Banco Nacional de Kazajstán). Esto es casi un 19% (o $ 857.2 millones) más que el primer trimestre de 2016. El mayor inversor extranjero es Holanda, seguido de EE. UU., Suiza, China y Rusia.

En el contexto de lo anterior, no hay razón para creer que el proyecto del Centro Financiero Internacional lanzado por Kazajstán seguirá siendo una idea utópica. Astana tiene todas las posibilidades de convertirse en el segundo Dubai o Singapur, solo en Asia Central. Convertirnos en un centro regional para atraer inversiones, utilizando tecnologías financieras modernas y un sistema especial de justicia basado en la legislación inglesa. En CFIA (Centro Financiero Internacional Astana) opera su propio sistema judicial independiente de Kazajstán, un tribunal independiente. Y los jueces extranjeros de nivel internacional trabajan allí. Ya han jurado un juramento al Presidente de Kazajstán. Todo esto garantiza la total imparcialidad del proceso y el estado de derecho.

Resumiendo, quiero señalar que después de haber estudiado a fondo las oportunidades de inversión de Kazajistán y las condiciones creadas para ellas, no es difícil entender por qué un país atrae capital extranjero incluso en condiciones en que el estado de la economía mundial no lo ayuda en absoluto. Con un nivel mínimo de confianza en el ámbito financiero y la volatilidad del mercado, Kazajstán sigue siendo un refugio confiable para inversores con muchas áreas que aún no se han dominado. Además del sector de las materias primas tradicionales, en Kazajstán con sus vastas áreas fértiles, la perspectiva de la agricultura es prometedora y el inversor chino ya está llegando activamente. Y el interés en el entorno de los negocios extranjeros es la esfera del transporte y la logística. Aún así, la ubicación conveniente del país entre Europa y Asia y la presencia de prácticamente toda la infraestructura necesaria para el transbordo de mercancías juegan un papel muy importante.

Y si todos estos argumentos para evaluar hasta qué punto Kazajstán superaban a los socios en la carrera de inversión aún no son suficientes, agregaría que justo a fines de 2017, Kazajstán adoptó un nuevo código fiscal, así como un código «Sobre el subsuelo y el uso del subsuelo», significativamente ampliar las oportunidades para los inversores. Y este año el Gobierno de la República está preparando otro paquete de enmiendas legislativas para mejorar el entorno empresarial a nivel nacional y subnacional.

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