Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.
bartle.JPG

Los bartleby del PP

Rajoy debería cambiar de táctica y ya que no habla, por lo menos podría montar una rueda de prensa y que se marque un cantecito. Ya me lo imagino saliendo con el puño en cuerno con aquello que cantaba Yosi, de Los Suaves: “Y si te preguntan por mí, tú di siempre que no estoy…”La del presidente es una política Bartleby: “preferiría no hacerlo”. Sigue con la mentalidad de un registrador de la propiedad.

Otro calladito es su heredero en Galicia, Núnez Feijóo. Han salido fotos con sepia de dos décadas con un contrabandista con apellido de oro falso. Vale, no significan nada. ¿Pero de verdad no sabía que se dedicaba al Winston de batea cuando hasta el tonto de la ría conocía el asunto? Vale, no lo sabía. Lo que está claro es que ha dicho que le han intentado chantajear con el asunto desde hace años y no hay ninguna denuncia al respecto. La razón sólo la sabe él. También se equivoca al fechar cuando rompió lazos con Dourado, según el party-line que tiene el juez en el sumario contra este último. Las cosas de la memoria selectiva.

Y para uno que tenía que estar callado, va y le entra la verborragia. Martínez Pujalte salta diciendo que lo que busca el Juez Castro imputando a la Infanta Cristina es protagonismo. Acaso su solución es ocultarlo todo o negarlo hasta que el niño diga que el rey va desnudo… Que sepa, que de todas las instituciones, el poder judicial es la que mejor funciona desde un punto de vista ético aunque luego se empantane con las triquiñuelas de las defensas y algunos jueces que quieren ser vedette. Seis docenas de imputados por los desmanes de las Cajas lo atestiguan –qué horror tener que hablar de impresentables por docenas como si se trataran de huevos.

Si los jueces hablaran del ejecutivo como hacen los políticos de la administración de Justicia, éstos protestarían como energúmenos. Los políticos deben de darse cuenta de que por una vez el callarse es positivo: fortalece la separación de poderes, base de un Estado de Derecho, base a su vez de un sistema democrático garantizado.

Ad latere. Raúl del Pozo, con El ruido de la calle, ha dado un martillazo al barril de pólvora del PP dinamitando al presidente del Gobierno y a todo su partido político. A Raúl, entre tortillas y fútbol, le han plantado las cuentas de la vieja con una decena de nombres aún guardados en la recámara con el objetivo de que Bárcenas salga libre de trenas. Lo de caer solo es muy aburrido, además de la cara de gilipollas que se te queda. Lo terrible es que no ha pasado nada, de tan aborregados.

Las dos opciones de voto mayoritario a nivel nacional: PP y PSOE, se han hecho impracticables. Quedamos a la espera de un Beppe Grillo para italianizarnos antes de caer ya de cabeza en algún populismo caribeño.

[email protected]

Loading

Loading

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

el distrito tv

Últimas Noticias

Scroll al inicio