Lo bueno de tener tiempo libre es que puede uno pasear casi diariamente por los parques de Madrid. Como vivo cerca del cementerio de la Almudena, tengo relativamente cerca mis dos parques preferidos: el Retiro y la Quinta de los Molinos. Hace años que los visito, pero ahora mucho más. Por una razón: me sale más barato caminar por Madrid que pagar un gimnasio. Son parques preciosos, sobre todo la Quinta -que ahora luce blanca por los miles de almendros que han florecido.
Pues tengo que decir alarmado que los parques madrileños, bajo la férrea y comunista dirección de Inés Sabanés, concejala de Medioambiente y movilidad del ayuntamiento de mi ciudad, están siendo mecanizados.
Cualquiera que pasee por estos parques se ve invadido por multitud de camionetas, coches, camiones, motos y demás vehículos municipales con una emisión de humos y ruidos absolutamente inaceptables. Parece que andar ya no se estila, y ahora los operarios que talan árboles y arreglan céspedes tienen sus derechos, y se desplazan de seto en seto en multitud de vehículos.
Los paseantes, huyendo del ruido de los coches en las calles, se ven asaltados por el ruido de esos vehículos, acompañados por el pitido irritante de los mismos cuando dan marcha atrás, además de por sierras mecánicas, aparatos corta césped, y multitud de cachivaches a motor. Y me da igual que sean eléctricos o a gasolina (como si la electricidad no proviniera en un 70% de la combustión de gas o petróleo). Lo digo por si alguien del Ayuntamiento se cuelga medallas por la «sostenibilidad» ecológica de dichos vehículos…
Inés Sabanés, no quieras acabar con el paro contratando cuadrillas de operarios para talar nuestros parques, no quieras acabar tampoco con la paz y el solaz de esos espacios con tanto vehículo a motor. Bastante tenemos, sobre todos los que ya somos mayores, con esquivar a los corredores, ciclistas, patinadores, personas que no miran por donde van con los cascos oyendo música o escribiendo mensajitos… que de eso ya escribiré otro día.
