Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.

La realidad paralela del Ayuntamiento

Hace unas semanas la alcaldesa Ana Botella asistió a la inauguración de una exposición sobre la Puerta del Sol, organizada por el Colegio de Arquitectos, que busca ideas para su eventual remodelación, bastante complicada si se tiene en cuenta que ninguna Administración Pública está dispuesta a financiarla. La alcaldesa, eso sí, se mostró muy interesada en, según sus palabras,”la puesta en valor” de uno de los “paisajes urbanos más significativos”.

La política consiste en decidir prioridades, sobre todo cuando, como es el caso, los recursos son escasos. La Puerta del Sol fue remodelada en 2009 y, sinceramente, no parece muy urgente hacerlo ahora otra vez: sería tan estrafalario como si usted decidiese hacer obras en su salón cada cuatro años. Pero si el Ayuntamiento de Madrid quiere hablar de lugares icónicos de Madrid, yo le recomiendo dos en los que hay mucho trabajo que hacer: la Plaza de España y la Plaza Mayor.

La Plaza de España lleva años jalonada de edificios vacíos o directamente ocupados, tiene su pavimento cada día en peor estado y sufre, en definitiva, de la desidia municipal: el Ayuntamiento no parece querer saber nada de ella desde el día en el que el PP prometió en su programa electoral una gran reforma que la uniría a Madrid Río, los Jardines de Sabatini y el Templo de Debod. Respecto a la Plaza Mayor, también tiene sus propios edificios vacíos, como la Casa de Carnicería, y aunque mantiene su encanto y atractivo turístico, corre el peligro de perderlo si continúa su degradación: cada vez son más las voces que advierten de la presencia de ratas en la plaza, una peligrosa compañía para los indigentes que duermen todas las noches en sus soportales.

Ni la Plaza Mayor ni la de España han sido merecedoras de la atención del Ayuntamiento de Madrid en los dos años largos que llevamos de legislatura. Luego se extrañan cuando baja el turismo (aunque la culpa siempre es de otros, claro) y se molestan si algún artículo periodístico les afea que la ciudad ha perdido rumbo, pujanza y encanto. El Gobierno municipal se ha acostumbrado a culpar al empedrado de los problemas de Madrid, pero la realidad es que las ocurrencias y las improvisaciones se pagan. Y de ocurrencias e improvisaciones el Ayuntamiento sabe bastante.

Ya que estamos con el turismo, pongamos un ejemplo: en solo dos años, esta política municipal clave ha pasado por tres departamentos: Economía, Vicealcaldía y Las Artes, sin contar la empresa municipal encargada del turismo -¿es necesaria?- que también en dos años ha sufrido sendos cambios de nombre y estructura. ¿Podemos permitirnos esos lujos? No deberíamos, sobre todo cuando desde otras administraciones, gobernadas también por el PP, se pone la zancadilla a la oferta cultural y de ocio de la ciudad con el IVA al 21%.

En fin, no hemos detallado todos los síntomas de la enfermedad de Madrid -¿está limpio hoy su barrio?- ni hemos analizado la causa de ésta, que básicamente se resume en años y años de despilfarro que ahora pasan la cuenta. Simplemente quería contrastar la realidad con el discurso complaciente del Ayuntamiento de Madrid. El PP parece vivir fuera de la realidad, o desde luego en una ciudad muy distinta a la de los madrileños. En esa realidad paralela se habla de cómo remodelar Sol. Eso explica, en parte, cómo está, de verdad, Madrid.

Loading

Loading

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

el distrito tv

Últimas Noticias

Scroll al inicio