Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.
Liberty Valance.jpg

Los remakes que mataron a Hollywood

Seguro que escucharéis frases parecidas a ésta en el año 2030, y os quedaréis tan patidifusos como cuando a mí ahora me dicen que las grandes obras del Hollywood clásico son Regreso al futuro y Los Goonies. Está por ver si los vampiros moñas y los chavalines malhablados envejecen tan bien como estos dos títulos, cosa que dudo bastante, pero no dejo de sorprenderme cuando me hablan de las virtudes del cine de los 80.

–Ya no se hacen películas como las de esos años prodigiosos. Cierto, pero también se debería tener en cuenta que fue la peor década de la historia del cine (al menos hasta que llegaron los noventa y los dosmiles, claro). Sin ir más lejos, la anterior, los 70, nos trajo los mejores títulos de Coppola y Scorsese, que tuvieron una enorme influencia en el cine posterior, el Woody Allen más imprescindible, el musical nostálgico tipo Grease, el Spielberg que cambiaría Hollywood para siempre, con Tiburón y Encuentros en la tercera fase, y hasta el modelo más imitado en el cine de hoy La guerra de las galaxias. ¿Qué se ha inventado después? 

Muchísimo antes, el Séptimo Arte había dado ya grandes títulos. Tanto es así que la lectura mañanera de Variety para informarme de lo que se cuece en Hollywood me enerva todos los días, pues no se respeta nada. Pero hace poco ha llegado la gota que ha colmado el vaso, pues Paramount pretende rodar un remake de El hombre que mató a Liberty Valance. La noticia me ha matado. Joya imprescindible en la que el maestro John Ford condensa todo lo que sabe sobre la vida, que es mucho, sin que este ágil western se vuelva ni mucho menos discursivo, el film protagonizado por John Wayne, James Stewart y Vera Miles cuenta cómo funciona el mundo a través del microcosmos de una pequeña ciudad del Oeste. Sí, también es verdad que es uno de los peor traducidos al español de la historia del cine. Para que luego digan que si los dobladores españoles son los mejores del mundo, patatín, patatán. Pues se lucieron en este caso. Pero donde realmente la liaron fue con la frase legendaria, que repiten una y otra vez los cinéfilos de todo el mundo, menos los españoles (al menos los que no hayan visto la versión original), y que en el resto del mundo es tan famosa como el "siempre nos quedará París" o "juro por Dios que nunca volveré a pasar hambre". 

–Cuando la leyenda se convierte en realidad, se imprime la leyenda (When the legend becomes fact, print the legend). ¿Es así en España? ¡No! El doblador dice una cosa completamente distinta. 
–Cuando los hechos se convierten en leyenda, no es bueno imprimirlos. 

¡Toma ya! Aquí ni los imprimimos ni nada. ¡Porque a ellos les dé la gana! Que sí, que hay que tomarse licencias por aquello de sincronizar. Pero a mí me sorprende tanto como cuando Gladiator había nacido en Trujillo para los que la vimos en V.O. y en la doblada… ¡en Mérida! Eso sí es tragársela doblada.

"Coge todo lo que hayas oído decir; todo lo que hayas oído decir en tu vida… Multiplícalo por cien, y seguirás sin tener una idea de John Ford". James Stewart.

 

Loading

Loading

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

el distrito tv

Últimas Noticias

Scroll al inicio