La primera jornada de pruebas a profesores en Madrid, de cara a la ‘vuelta al cole’, fue un verdadero caos. Y es que miles de docentes y miembros del personal de escuelas infantiles y colegios de la Comunidad, se agolparon este miércoles a las afueras del centro Virgen de la Paloma, elegido para llevar a cabo los test serológicos de la zona centro.
Kilométricas colas se formaron desde temprano a las afueras de la referida casa de estudios, en la que se realizaron unas 16.000 pruebas de las 100.000 que esperan completar hasta el día 7 del presente mes.
El desconcierto y la confusión provocó que Ribera Salud, la empresa a la que el Ejecutivo regional le encargó el operativo por un importe que aún no ha sido develado, suspendiera la actividad del miércoles y reorganizara las últimas citas del día «por saturación».
Las quejas de la oposición y de los sindicatos no se hicieron esperar, en medio del gigantesco reto que supone volver a las clases en Madrid, donde se han registrado 1.104 contagiados en las últimas 24 horas, y que cuenta con aproximadamente 1,2 millones de alumnos universitarios y casi 100 mil profesores.
“Por saturación en la gestión de las pruebas, se suspende la convocatoria de hoy y se recibirá comunicación para el viernes”, rezaba el comunicado enviado.
Poco después, la Consejería de Educación aclaró que se habilitarán los días necesarios -incluido el sábado- para que todos los implicados lleguen al inicio de las clases con la prueba hecha.
La vuelta al cole está programada de manera escalonada para las fechas comprendidas entre el 4 y el 28 de septiembre.
De esta manera, la apuesta de Isabel Díaz Ayuso en realizar más de 100.000 test anticuerpos al personal docente y no docente, que además será prolongada por un estudio serológico de más de 42.000 pruebas a 13.000 alumnos y 1.500 profesores en tres fases (septiembre, diciembre y marzo), exige desde ya un recorte de plazos a como dé lugar.
Pruebas menos precisas
El tipo de test serológico que se le está empleando a los profesores y personal no docente es mucho menos preciso que la PCR, y da con frecuencia tantos falsos negativos como falsos positivos.
Y es que esta prueba detecta los anticuerpos que genera el organismo, en lugar de la presencia del virus como tal.
De acuerdo a los expertos en epidemiología, lo ideal para evitar que los profesores lleven el virus a las aulas durante los primeros días de clase sería realizar la PCR, que es más efectiva y, en este caso, solo se le realizará a quienes den positivo en el test serológico.
Sin embargo, la efectividad de la PCR se mide también por la periodicidad, razón por la cual la Comunidad de Madrid repetirá unas 42.500 en otras dos tandas entre diciembre y marzo.
