En el caso de Sainz de Baranda, la estación estará totalmente operativa en octubre y en ella se han invertido 17 millones de euros. Las obras han estado destinadas, sobre todo, a mejorar la seguridad. La estación cuenta ahora con dos nuevas salidas de emergencia, un nuevo vestíbulo, cinco ascensores y se ha realizado la ampliación de las zonas técnicas.
Tras 25 meses de obras, la estación ha sido visitada por José Ignacio Echeverría, consejero de Transportes e Infraestructuras, que explicó que el objetivo es “que las estaciones más antiguas cuenten con las mismas comodidades que presentan las de reciente creación”.
Rampas con mucha pendiente
Por su parte, las obras en la estación de Pacífico han provocado algunas críticas, debido a la pendiente de las nuevas rampas que que permiten el acceso a la Línea 1 desde el vestíbulo principal.
El CERMI Comunidad de Madrid (Comité de Entidades de Representantes de Personas con Discapacidad), ha denunciado que estas rampas rodantes tienen una pendiente superior al 20%, cuando el máximo autorizado para este tipo de elementos es de un 10%. Esta organización apunta además, que esta pendiente resulta “un riesgo para todos los usuarios, pero más concretamente para los ancianos, las mujeres en estado de gestación o personas que cuenten con una discapacidad física”.