Recientemente el Ayuntamiento de Madrid anunció la privatización los servicios de conservación de los parques y jardines históricos de la capital, que hasta ahora corría a cargo de jardineros municipales. Las entidades vecinales de la zona han manifestado su preocupación por si en próximas fechas se decide desde la Administración Local cobrar por acceder a determinadas zonas de El Retiro.
Los asociaciones de vecinos aseveran disponer de información al respecto y denuncian que los supuestos planes del consistorio pasarían por que los visitantes de las zonas más especiales de El Retiro tengan que abonar alguna cantidad de dinero.
La preocupación de los vecinos de la zona por el hecho de que El Retiro se convierta en una zona verde ‘de pago’ aumentó a raíz de conocerse que a partir del 1 de noviembre, cuando entre en vigor el nuevo contrato, cuyo concurso está abierto, se extenderá la privatización del mantenimiento de los jardines de Madrid a los últimos parques históricos que aún mantenían los servicios municipales: Casa de Campo, Fuente del Berro y Retiro.
En consecuencia, el servicio de jardinería quedará prácticamente externalizado, con excepción de dos zonas del Retiro y de la Casa de Campo, que representan alrededor de un tercio de su espacio, en el que continuarán trabajando los 220 jardineros funcionarios existentes en el Ayuntamiento.