La pasada semana se vivieron momentos bastante tensos ante las puertas de uno de los hoteles más conocidos de la ciudad de Madrid, el Ritz. El motivo de la concentración de personas con pancartas de protesta que allí tuvo lugar, el pasado 2 de julio, era el despido de diez trabajadores del lujoso hotel.
El sindicato CC.OO. califica los despidos de “indiscriminados motivados, según la dirección de la empresa, por la crisis económica”. Todo ello, teniendo en cuenta, según relata el sindicato, que el día previo a los despidos el hotel estaba ocupado por clientes en un 80%. “Tan sólo la facturación de la terraza fue de 12.000 euros”.
El problema: la nueva dirección
La sección sindical de CC.OO. ya había denunciado anteriormente la falta de diálogo y el deterioro de las relaciones laborales en la empresa, desde que en 2004 llegara la nueva Dirección. Aseguran, sin embargo, que no van a cesar en su lucha “por la defensa de los intereses de los trabajadores; y más, cuando los despidos no tienen causa alguna, en plena campaña veraniega, sin descenso de la ocupación y manteniéndose la facturación”.
A día de hoy, no se descarta la convocatoria de más movilizaciones. En algunos casos, hasta se plantea la posibilidad de llevar a cabo una huelga.
Un portavoz del comité de empresa de CC.OO. ha afirmado que los trabajadores vienen “sufriendo atropellos”, desde que el Hotel Ritz cambiara su equipo directivo. Este hecho tuvo lugar hace 5 años, cuando el hotel fue adquirido, al 50%, por Omega Capital, propiedad de Alicia Koplowitz y la cadena hotelera estadounidense Orient-Express.
Según el portavoz, la nueva Dirección se comprometió a mantener la plantilla de Ritz, entorno al 88%, “compromiso que no han cumplido”; y que no han querido renovar, ya que expiró el pasado 19 de junio.
Actualmente, el hotel cuenta con una plantilla de 246 trabajadores.
