Un hombre estrelló su Ferrari 458 Italia contra un contenedor de calle Velázquez la madrugada del pasado domingo. Tras el golpe el conductor se bajó del vehículo, valorado en 240.000 euros sin extras, y huyó, según varios testigos. La Policía opina que el hombre abandonó el coche tras el accidente porque al parecer podría ir bebido. Los agentes localizaron horas más tarde al conductor que aseguró que había quedado trastornado tras el golpe.
El Ferrari 458 quedó siniestro, ya que sufría graves daños en la carrocería. Según los testigos, el vehículo iba a gran velocidad y al tratar de esquivar a otro coche se estrelló contra un contenedor situado en la calle de Velázquez. El impacto fue tan grande que saltaron los airbag del vehículo. Los testigos añadieron que el conductor, medio desorientado, salió del coche y se marchó del lugar a pie. Por el momento, ha sido multado el propietario del coche y se está a la espera de saber si se le puede acusar de un delito contra la seguridad vial.
