Según han informado a Efe fuentes de la investigación, que lleva a cabo la Guardia Civil, la autopsia practicada a ambos certifica que la muerte se produjo unas doce horas antes del hallazgo de los cadáveres. El presunto autor del doble homicidio, hijo y sobrino de las víctimas, y que se suicidó en Madrid el sábado por la mañana al arrojarse al vacío desde la azotea de un edificio de 22 plantas de la plaza de Castilla, presentaba también heridas en la mano derecha.
Los cuerpos de los dos hermanos fueron hallados por la Policía Nacional y la Guardia Civil en la casa de la persona que se suicidó en Madrid, que vivía en la urbanización Parque Azul de Colmenarejo donde residían también su padre y su tío, para tratar de localizar a algún familiar.
Al llegar al domicilio no respondía nadie y entonces solicitaron al juez la entrada y el registro en la vivienda, donde encontraron los cadáveres de dos personas: el padre y el tío del fallecido, nacidos en 1953 y 1959, respectivamente. Fuentes del instituto armado informaron a Efe de que en la primera inspección ocular no se halló ninguna nota del presunto autor del doble crimen.
